En torno a 4.500 ascensores de toda Canarias necesitan pasar de inmediato la inspección técnica correspondiente fruto de la nueva normativa autonómica que empezará en vigor en septiembre.

Así lo detalló ayer el director del área de formación de la Federación del Metal y las Nuevas Tecnologías de la provincia de Las Palmas (Femepa), Víctor Rubio, quien avanzó que esa cantidad tienen que hacerlo ya y eso va a suponer una mayor demanda de técnicos ascensoristas.

Rubio cifró en 35.000 los ascensores instalados en toda Canarias que a partir del lunes tienen que acogerse a la nueva normativa que presentó el pasado martes el Gobierno regional.

En virtud de este reglamento, los elevadores que no hayan pasado su correspondiente inspección técnica periódica serán paralizados cautelarmente hasta que el organismo de control certifique que se encuentran en buen estado de funcionamiento.

La nueva norma establece que las entidades conservadoras "deben comunicar mediante carta, y en un plazo máximo de dos meses, a los titulares de los ascensores la obligación de cumplir con las inspecciones periódicas obligatorias que regula la norma estatal" y que "en caso de no hacerlo, el conservador deberá proceder a su paralización", establece el decreto.

Son los propietarios de los aparatos, según la nueva normativa, los que deben contratar a un organismo de control para llevar a cabo dichas inspecciones. La Entidad Nacional de Acreditación (ENAC) ofrece en su página web un buscador de entidades acreditadas donde se pueden consultar los organismos que cuentan con acreditación en Canarias para llevar a cabo esta tarea.