La Audiencia de Las Palmas ha condenado a dos años de cárcel y al pago de una multa de 1,57 millones de euros al empresario Jaime Cortezo Massieu, por defraudar a Hacienda más de medio millón en ejercicio de 2008.

La sentencia considera probado que la sociedad mercantil Residencial Hoya del Pozo, de la que era administrador único el acusado, eludió ese año el pago de 525.040 euros que debía tributar por impuesto de sociedades "con claro ánimo de defraudar".

El tribunal entiende que, para ello, la sociedad de Cortezo Massieu "alteró deliberadamente la realidad de su base imponible", por dos vías: "omitir ingresos efectivamente percibidos y consignar gastos que bien no fueron reales, o bien siéndolo, no tenían la condición de deducibles".

Entre las cantidades que entienden que el empresario se dedujo irregularmente, los magistrados citan dos donaciones de 20.000 euros cada una al PSOE y a Nueva Canarias, así como compras de artículos de joyería y ropa en "establecimientos de lujo" que no guardaban relación alguna con la actividad de Residencial Hoya del Pozo.

La sentencia declara al empresario autor de un delito contra la Hacienda Pública, por la que le impone dos años de cárcel (uno menos de los que demandaba la Fiscalía) y una multa equivalente al triple de la cantidad defraudada.

Además, le obliga a indemnizar a Hacienda con los 525.020 euros no tributados hace nueve años, más los intereses legales.