La Gomera llevó a cabo una de las celebraciones más características de La Gomera y que no es otro que un sentido homenaje a sus mayores. En realidad el día internacional de la tercera edad tiene lugar todos los 1 de octubre. Sin embargo, en La Gomera se tomó la decisión hace diez años de realizar otro cuyas características principales son que no tiene fecha ni lugar determinado. O lo que es lo mismo, que en cada ocasión se elige un emplazamiento y día diferentes.

El homenaje que todos los años La Gomera le rinde a sus mayores se ha convertido en una cita esperada por los gomeros de todas las edades y rincones de la Isla. Desde hace tiempo, el Cabildo consideró justo que nuestros abuelos no solo tuvieran un día al año, sino incluso dos, en los que poder demostrarles cariño, reconocer su labor, legado y trabajo. En esta ocasión ha sido elegido para llevar a cabo esta celebración el sábado 26 de noviembre y como lugar el municipio de Valle Gran Rey. Allí setecientos mayores fueron convocados en esta cita para que un año más sientan y comprueben el cariño que le profesa la Isla en la que nacieron.

El presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo Curbelo, es gran parte el responsable de esta tradición que ahora cumple una década. No duda que se trata de un encuentro de convivencia, repleto de actividades que giran entorno al ocio y a la festividad. Especialmente llamativo resulta este año el homenaje que se le hizo a los gomeros centenarios: en total seis mujeres y dos hombres.

A la cabeza está Tomasa Carolina Méndez Mendoza con 106 años, quien al igual que Elina Darias Darias, con 100 años, es de San Sebastián. Adoración Paz García es de Hermigua y tiene 103, mientras que Rosalía Medina Rodríguez, con 102, es de Agulo. En Vallehermoso estarían Adrián Santos González, con 101 años, y Celia Ramos Vera con cien, y por último los centenarios de Valle Gran Rey son Antonio Navarro Santos, con 101 años y Clara Santos Negrín con 102.

"Por lo tanto, creo que una vez más queda claro con estas iniciativas el carácter de reconocimiento a esa larga trayectoria en defensa de nuestra isla y de las familias gomeras para consolidar la realidad actual que es muy distinta a la que, por desgracia, ellos tuvieron que vivir con anterioridad". Curbelo resaltó del encuentro de mayores precisamente su carácter de reconocimiento y homenaje a nuestros abuelos. Todo ello envuelto en un ambiente de festividad y religiosidad.

La consejera de Asuntos Sociales, Elena García Meneses, indicó que llevan varias semanas de preparativos y recordó que esta es la segunda ocasión que como consejera participó en estas fiestas. La elección de Valle Gran Rey no es del todo casual y tiene mucho que ver con el buen tiempo que se agradece en esta época del año. Además, en este municipio históricamente se ha asentado un potente movimiento de la tercera edad y prueba de ello es la existencia de dos asociaciones a la vez, del total de siete que existen en el resto de la Isla.

El presidente de la asociación de mayores de Valle Gran Rey, Manuel García, llevaba tiempo esperando este nuevo encuentro. Hasta ahora ha participado en los diez que se han llevado a cabo, con lo cual es todo un veterano de esta fiesta. "Es ese momento del año en el que nos vemos y nos divertimos. Cada vez es en un sitio distinto y ahora le ha tocado a Valle Gran Rey, tal y como ocurrió hace ya cinco años", recordó en este ocasión el programa de actos estuvo conformado por una procesión, eucaristía, actuaciones musicales y alguna sorpresa.

En cuanto al apoyo que obtienen del Cabildo, consideró que lógicamente se podría hacer más, pero también entendió que "no se puede tener de todo, ni cumplir siempre todas las promesas". Por lo pronto, los cerca de setenta socios participaron en las actividades de gimnasia, talleres de pintura o informática. En general, se sienten escuchados por el Cabildo pero, por ejemplo, el apoyo económico que perciben, no cubre todas las necesidades.

La mayoría de los socios aporta 50 euros al año, una cantidad que se convierte casi en simbólica dados los gastos a los que tienen que enfrentarse habitualmente. "Pero no nos quejamos demasiado", indicó. De encuentros anteriores lo que más le gusta es, por supuesto, el baile. "Siempre nos lo pasamos bien".

La consejera indicó que la unión del Cabildo con los mayores es "fundamental" y la razón es que los consideran "el pilar de la sociedad". Por ello, desde la institución insular intentan en la medida de sus posibilidades darle todas las actividades que les demandan. Con este fin existe un programa de mantenimiento físico que este año ha intentado llegar a lugares recónditos a donde antes era muy difícil trasladarlos. Por ejemplo, a Taguluche, Arure o La Lomada en San Sebastián.

Porque los mayores que viven en estos puntos también tienen derecho, como los demás a participar en los cursos de pinturas o actividades físicas. Y así hasta primeros de diciembre para comenzar de nuevo. Porque las previsiones pasan por mantener el presupuesto y continuar con la política de apoyar económicamente a las asociaciones para que así puedan desarrollar su propia dinámica.

Como principal reto el presidente nunca ha escondido su intención de convertir el antiguo hospital insular en un gran centro dedicado a los mayores. Un lugar donde tengan recursos y medios para una mejor calidad de vida y afrontar sus diferentes problemáticas y necesidades.