Nueva Canarias defenderá en el Pleno del Parlamento que comienza hoy una enmienda a la totalidad de la Ley del Suelo, un proyecto que, a su juicio, desregula la gestión del territorio en las Islas mediante la habilitación de unas "puertas traseras" que permiten eludir el planeamiento.

El presidente de NC, Román Rodríguez, admitió ayer que su formación coincide con cerca del 90% del texto de la futura ley, puesto que se trata de una "refundición" de la normativa anterior o de algunas novedades necesarias -como las facilidades para regularizar instalaciones ganaderas-, pero alertó del peligro que supone ese 10% para "el proyecto de Canarias -al dejar "todo el poder a los ámbitos locales"-, generar inseguridad jurídica, poner en riesgo al sector primario y, en suma, dirigirse hacia "un modelo de desarrollo basado en el uso intensivo del suelo y en el binomio construcción y turismo".

La iniciativa legislativa del Gobierno consagra, según Nueva Canarias, instrumentos que tendrán primacía sobre el planeamiento, como los proyectos de interés insular y autonómico, además de las ordenanzas y los convenios. A juicio de los nacionalistas de izquierdas, estas "puertas traseras" representan, de hecho, una desregulación del territorio.

La posibilidad de autorizar nuevos usos en suelo rústico -turísticos, industriales, de ocio, residenciales...-, más allá de los que con carácter excepcional prevé la legislación actual, es otro de los peligros que, para NC, encierra el proyecto. "La presión que el turismo generará sobre el suelo agrario terminará por desplazar las actividades del sector primario", vaticino Román Rodríguez.

La desaparición o pérdida de peso de la Cotmac se traducirá, desde el punto de vista de NC, en la existencia de "95 órganos ambientales" -en referencia a los 88 ayuntamientos y los siete cabildos-, aunque el presidente y portavoz parlamentario del partido reconoció que el acuerdo de los socios de gobierno -CC y PSOE- para que un ente autonómico siga realizando la evaluación ambiental estratégica de los planes generales constituye "un pequeñito avance". Aun así, Rodríguez insistió en la necesidad de que dicho órgano no ejerza solo esta función, sino también la emisión de los informes de legalidad del planeamiento.

Rodríguez admitió que la gestión territorial y medioambiental presenta problemas que hay que atajar, aunque "la respuesta no puede ser matar moscas a cañonazos".

El Parlamento regional ha abierto una vía para que los ciudadanos planteen enmiendas a las iniciativas legislativas. Pese a que aún no se ha aclarado si eso será posible con la Ley del Suelo, Nueva Canarias confía en que, una vez tomada en consideración, recibirá aportaciones durante un periodo de 25 días.