El Cabildo majorero ha iniciado una campaña de tres meses de duración para la protección y conservación de la pardela cenicienta, a través de un servicio de vigilancia, recogida y atención para la posterior liberación de esta especie de ave marina.

La consejera insular de Medio Ambiente, Natalia Évora, ha señalado en un comunicado que se ha informado sobre el inicio de la campaña a administraciones públicas y otros organismos, como la Agencia de Protección Civil o Cruz Roja, cuya cooperación "es de vital importancia para el desarrollo de nuestra labor".

Desde el Cabildo se ha iniciado además el reparto de folletos informativos y cartelería en distintos centros hoteleros y de ocio de las zonas cercanas al mar donde nidifica la pardela.

En el caso de encontrar un ejemplar accidentado, Medio Ambiente ha recomendado recoger la pardela con mucho cuidado, introducirla en una caja cerrada con ventilación y conservarla en un sitio tranquilo, evitando hacer ruido a su alrededor.

La consejera ha recordado que "el Cabildo posee cajas de cartón diseñadas para este fin", y que, en el caso de no disponer de ellas, es recomendable que tenga agujeros para su ventilación y papel en el fondo para evitar que se estropee el plumaje.

Se aconseja además no administrar ningún tipo de alimento o líquido, y ponerse en contacto de forma urgente con la Unidad de Medio Ambiente del Cabildo.

Desde la institución insular también han señalado que resulta "primordial" que la persona que encuentre el animal recopile la mayor información posible, como el lugar exacto y las circunstancias de su hallazgo, y han advertido de que "en ningún caso" se libere al animal sin la supervisión del personal de Medio Ambiente.