La presidenta del Cabildo de El Hierro, Belén Allende, manifestó ayer su disconformidad por la decisión "unilateral" adoptada por el Instituto Hidrográfico de la Marina (IHM) a la hora de denominar de manera oficial con el nombre de "Tagoro" al volcán submarino.

Concretamente, el nombre para esta estructura, nacida a partir de la erupción del 10 de octubre de 2011, surgió a propuesta de los investigadores del proyecto "Vulcano", que lidera el Instituto Español de Oceanografía (IEO).

"De nuevo se pone en evidencia el divorcio existente entre la comunidad científica y la sociedad. El Hierro ha debido participar, a través de sus instituciones, en la toma en consideración del nombre de este volcán", señaló la presidenta de la institución insular.

Según Belén Allende, "durante todo el proceso sísmico-volcánico, los herreños tuvimos que padecer los efectos negativos de las lagunas científicas de los distintos colectivos de investigación que participaron directa e indirectamente en el proceso, y ahora nos dejan al margen en un hecho de relevancia para nosotros y para el futuro uso promocional de este volcán y su nombre por parte de la Isla".

La presidenta cree que no se trata de un hecho irrelevante, pues hubiera logrado que los herreños "hagan más suyo este hecho ya histórico que ha ocurrido a tan sólo dos millas de La Restinga".