Cirujanos españoles y del MD Anderson Cancer Center de Houston, reunidos en Gran Canaria en el V congreso de la Asociación Española de Cirujanos de la Mama (Aecima), han analizado hoy cómo evitar las cirugías en pacientes con carcinomas iniciales y en los ya tratados con quimioterapia.

Este ha sido uno de los asuntos que han centrado las presentaciones y ponencias de la segunda jornada de esta cita médica, según han explicado la presidenta de la Aecima y responsable de la Unidad de Mama del Hospital Vall d''Hebron, Isabel Rubio, y Víctor Vega, presidente del comité organizador del congreso, que recae en el servicio de cirugía del complejo hospitalario Materno-Insular de Gran Canaria.

Rubio ha destacado la presencia en este congreso del doctor Henri Kuerer, del MD Anderson Cancer Center, quien ha disertado sobre cómo hacer menos cirugía en pacientes que han recibido tratamientos de quimioterapia previos, a los que, en ocasiones, no se necesita hacer tanta cirugía como si se operara inicialmente.

La evitación de cirugías radicales también es factible en el tratamiento de pacientes con carcinomas muy iniciales de mama, que todavía no se han convertido en invasivos, por lo que no tienen capacidad de salir de la mama, ha explicado Rubio.

"A veces hacemos cirugías que son más radicales de lo que necesitamos, hay nuevos estudios para determinar en estos pacientes cuáles verdaderamente necesitan tratamiento y cuáles no", ha referido.

La especialista ha asegurado que "hay un porcentaje de cirugías que podrían ser más conservadoras" y ha augurado que "en un futuro, con el tratamiento multidisciplinario del cáncer de mama, todos los pacientes tendrán menos cirugías, quimioterapia y radioterapia".

A su juicio, "si conseguimos los mismos resultados oncológicos con menos tratamientos, la calidad de vida de las pacientes que ahora tienen supervivencias muy altas es muy mejorable. Estamos en el proceso de individualizar los tratamientos, lo que incluye menos de todo".

La presidente de la Aecima ha añadido que aunque algunos estudios afirman que la incidencia del cáncer de mama "ha aumentado ligeramente, esto no está claro del todo" y ha resaltado que "la realidad es que la mortalidad sigue disminuyendo", de ahí que estime que lo que se necesita "es encontrar la manera de poder solucionar el problema del cáncer para que no sea una enfermedad mortal".

Sobre la detección precoz de esta enfermedad, Rubio ha considerado que a la hora de diseñar los programas de cribado de cáncer de mama, que de forma general en España se hacen con mamografías a miles de mujeres con una periodicidad bianual entre los 45 y los 70 años, es muy importante evaluar previamente el riesgo que tiene cada una de padecer esta patología.

"El riesgo de cada mujer de tener un cáncer de mama no es el mismo en todas y hasta ahora les hacemos lo mismo, creo que en un futuro no muy lejano tendremos que establecer programas de cribado que se adecúen a esos riesgos, para lo que hay que estudiar los antecedentes que existen en la familia y en la propia mujer, de forma que se pueda valorar a qué mujeres hay que hacer más mamografías o menos", ha referido.

En este congreso se ha retransmitido una reconstrucción de una areola y un pezón con tatuaje y también se ha presentado la radioterapia intraoperatoria en pacientes con cáncer de mama seleccionadas con la que han sido tratadas 78 mujeres en el complejo hospitalario Materno-Insular de Gran Canaria, que la practica desde hace un año y cuatro meses.

Esta técnica también la realiza el Hospital Doctor Negrín, de la misma isla.

El presidente del comité organizador, Víctor Vega, ha resaltado los beneficios que este tratamiento ofrece a las pacientes, quienes reciben radioterapia en el mismo momento del acto quirúrgico, con lo que se evitan las habituales sesiones posteriores a la intervención, que se suelen prolongar durante tres y cuatro semanas .

Vega ha explicado que, además de ser más cómoda para la paciente, esta práctica tiene la misma efectividad que la tradicional, si bien produce muchos menos efectos estéticos, ya que la mama no se irradia por completo, sino en la zona donde se aloja el tumor.