El Departamento de Geografía de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) considera que el anteproyecto de Ley del Suelo devuelve a Canarias "al pasado", al renunciar a la ordenación integrada del Archipiélago -con la derogación de las Directrices de Ordenación General- y debilitar el planeamiento insular.

El departamento ha acordado adherirse a la alegación presentada al anteproyecto por el arquitecto y urbanista Faustino García Márquez y los geógrafos de la ULPGC Emma Pérez-Chacón Espino, Ramón Díaz Hernández y Ángela Castellano Santana.

Según estas alegaciones, el texto de la futura norma "priva a los planes insulares de la capacidad para ordenar actividades económicas, para establecer un sistema urbano insular que aproxime los servicios a los ciudadanos, o para reclasificar suelo de urbanizable a rústico por razones ambientales". Todo ello, aseguran García Márquez -que fuera director de la Agencia Canaria de Desarrollo Sostenible- y los tres geógrafos, irá en detrimento de mantener lo que hoy hemos conseguido: que algo más del 40% del territorio conserve su patrimonio natural y cultural.

El Departamento comparte con los redactores de la alegación la preocupación por la renuncia a la ordenación integrada del Archipiélago. Inciden en que el territorio de los espacios insulares es especialmente frágil, al tiempo que supone un recurso fundamental para sus habitantes, y consideran que su utilización requiere una perspectiva de conjunto, que incorpore criterios de sostenibilidad y tenga en cuenta la capacidad de carga de cada isla y no solo los beneficios a corto plazo.

Además, entienden que el anteproyecto parte de un diagnóstico erróneo: lo que se denomina la "maraña burocrática" no señala, a su juicio, el núcleo del problema, que son los escasos medios materiales y humanos con los que las administraciones afrontan esos aspectos.