La posibilidad de que se convoquen oposiciones tras años sin una oferta de empleo público importante puede haber sido una de las causas de que la matrícula del Máster Interuniversitario en Formación del Profesorado de Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato, Formación Profesional y Enseñanza de Idiomas haya superado las expectativas. El cupo de 200 plazas que ofrece la Universidad de La Laguna (ULL) para cursar este posgrado se ha quedado corto. Cerca de 30 personas no han conseguido entrar y una de ellas ha creado una petición en la plataforma change.org que ya ha conseguido más de 500 firmas.

El director de la Escuela de Posgrados de la ULL, Ernesto Pereda, reconoce que hay especialidades del máster que han tenido una demanda superior a lo esperado y que algunos alumnos han pedido que se amplíen las plazas. Sin embargo, esta opción es prácticamente inviable a corto plazo. Cada máster tiene que pasar por un proceso de verificación a nivel estatal. La Agencia Nacional de Evaluación y Certificación Académica (ANECA) es la encargada de dar el visto bueno a cada uno. Una de las exigencias del organismo nacional es que cada informe incluya el número de plazas y los recursos materiales y humanos con los que se cuenta. "Si nos lo saltáramos pondríamos en riesgo el máster, y eso no puede ocurrir", dice el responsable. "La única alternativa para este curso, que se puede negociar con la Aneca, pasa por aumentar el cupo un 10%".

Los alumnos consideran que el problema que se ha producido este año tiene que ver con la unión de varias especialidades y la supresión de plazas. "Este máster se ha venido impartiendo desde hace varios años con 21 especialidades y 20 plazas por especialidad, pero este curso el número de especialidades se ha visto reducido a 15, cada una con 22 plazas", explican. Pereda reconoce que se han unido especialidades, pero subraya que en otras ocasiones algunas no han llegado al mínimo de alumnos requerido para poder ofertarse, lo que también ocasiona problemas.

Según los estudiantes, "hasta el curso pasado existía la especialidad de Lengua Castellana y Literatura y la especialidad de Latín y Griego, ambas con 20 plazas disponibles cada una. La situación se complica cuando, a partir de ahora, estas dos especialidades se convierten en una sola llamada Especialidad en la Enseñanza de la Lengua y la Literatura (Castellana, Latín y Griego), y solo cuenta con 22 plazas, por lo que donde antes cabían 40 personas, ahora solo casi la mitad. En estas especialidades hay cuatro personas que se han quedado fuera y cumplen todos los requisitos". Pereda no está de acuerdo con las apreciaciones de los alumnos. Ellos presentaron su preinscripción en septiembre, mientras que el resto lo hizo en junio, señala. Así y todo, el centro estudiará la posibilidad de aumentar la oferta en futuras ediciones.

Un posgrado que supone el 20% de la oferta

El debate de los másteres habilitantes ya ha comenzado. Desde hace algunos años, las universidades incluyen en sus catálogos posgrados "habilitantes", es decir, que estudios que capacitan para ejercer una profesión. El de Profesorado es uno de ellos, pero no el único. El de Abogacía, que la ULL empezó a impartir recientemente, es otro. Para que un alumno ejerza como abogado o dé clases en el sistema público necesita tener el correspondiente título. Ese es el argumento que usan los estudiantes para considerar que su caso es distinto al de otros estudios con "lista de espera". Hasta que se puso en marcha el máster del Profesorado, los licenciados solo necesitaban el extinto Certificado de Aptitud Pedagógica (CAP). El máster del profesorado, a pesar de la alta demanda, supone el 20% de las plazas totales de máster que oferta la ULL. No es el único en el que las solicitudes han superado las expectativas. También lo han hecho el de TIC en la educación, el de Psicología Sanitaria y el de Biología Marina.