La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias se sumó ayer a la celebración del Día Mundial del Ictus y aprovechó para recordar la importancia de mantener unos hábitos de vida y de alimentación saludables para prevenir esta patología que sigue suponiendo la segunda causa de mortalidad, la primera causa de discapacidad grave y la segunda causa de demencia en la población.

En Canarias, a pesar de contar con una de las tasas de mortalidad por ictus más bajas del territorio nacional, se producen cada año 2.267 nuevos casos de ictus. En los últimos años se ha observado una disminución de las muertes por ictus, tanto a nivel nacional como de Canarias. El ictus o accidente cerebrovascular es una enfermedad vascular que afecta a las arterias que llevan la sangre al cerebro. Por diversas causas, las células del cerebro se quedan sin el aporte necesario de sangre, por lo que pierden su función, apareciendo cuadros de parálisis de medio cuerpo, trastornos del habla, etc.