La federación ecologista Ben Magec ha solicitado hoy que el primer borrador de la nueva ley canaria del territorio refleje las conclusiones a las que se llegue previamente en el, a su juicio, necesario procedimiento participativo de diagnóstico.

Tras el anuncio de la elección del grupo de expertos que trabajarán en la redacción del texto que compondrá la nueva Ley de Territorio de Canarias, Ben Magec considera que, antes de que se redacte su primer borrador, debe abrirse un procedimiento de análisis del contexto y diagnóstico de la situación, en el puedan participar tanto la federación ecologista como cualquier persona u organización que lo solicite.

Por ello, la federación ecologista ha anunciado en un comunicado que ha enviado una carta al presidente del Gobierno canario, Fernando Clavijo, y a los responsables regionales de Ordenación Territorial, para trasmitirles dicha propuesta.

La opinión de partida de la organización difiere de la opinión gubernamental, que condicionará la formulación del corpus normativo y dificultará el consenso final en caso de hacerse un borrador con las premisas equivocadas, refiere Ben Magec en la nota.

A juicio de los ecologistas, la legislación canaria y la planificación política han sufrido una clara regresión en cuanto a la voluntad de conservar los recursos naturales y contener la tendencia a hipertrofiarse de un sector como la construcción, en detrimento de sectores vitales como el primario y a costa del excesivo uso de un recurso no renovable como el suelo.

Para Ben Magec, "la Ley de Armonización y Simplificación en Materia de Ordenación del Territorio y los Recursos Naturales ha cercenado cualquier posibilidad de buscar amparo en unas Directrices de Ordenación del Territorio que, hasta su aprobación, eran de obligatorio cumplimiento (aunque no se cumplieran), y ahora se han convertido en unas meras orientaciones sin ninguna capacidad vinculante".

La organización también advierte de que "en los últimos tiempos el marco normativo estatal y canario han sufrido la embestida de normas desreguladoras como la Ley de Montes, la Ley de Costas, la citada Ley de Armonización, o la Ley de Renovación y Modernización Turística de Canarias, que levanta la moratoria turística aprobada en 2003 y da pie a que se puedan volver a construir nuevos establecimientos turísticos en nuevo suelo".

Por todo ello, Ben Magec quiere ampararse en las garantías que aún ofrecen los convenios internacionales firmados por el Estado español, como el Convenio de Aarhus y su aplicación al marco jurídico europeo y estatal, y solicita que esta necesaria fase de diagnóstico previo se abra a todos los colectivos interesados, tanto ecologistas y conservacionistas como a cualquier otro que considere que tiene algo que aportar al respecto de un tema de interés general.