La organización ecologista Ben Magec ha acusado al Gobierno canario y al Cabildo de Tenerife de bloquear el desarrollo de las energías renovables en el Archipiélago por su apuesta por la implantación del gas natural, para lo que se construirá una planta regasificadora en el puerto de Granadilla.

El vigente plan energético de Canarias establecía el objetivo de que en las Islas la generación eléctrica con energías limpias fuera del 30% en 2015, pero solo se ha llegado al 6%.

Según los ecologistas, el coste del gas para la Isla no será solo el bloqueo de las energías renovables, sino también los costes de inversión, el precio en alza del gas natural licuado y la construcción del puerto de Granadilla.

La presencia de las energías limpias se limita al 6%, muy lejos del objetivo del 30%, recuerdan

"La única justificación que persiste" para "la innecesaria culminación" del puerto de Granadilla es introducir el gas, aseguran los ecologistas.

Además, agregan, dada la rigidez de los ciclos combinados diseñados para Canarias, se impediría una capacidad de regulación adecuada para la penetración de energías renovables en el sistema.

Ben Magec detalla que la energía eólica tiene un potencial de más de 30 veces el consumo actual de Canarias, aunque a corto plazo, con la tecnología disponible, se puedan instalar unos 2.500 megavatios.

"También disponemos de sol aprovechable mediante colectores de energía fotovoltaica y térmica, además de todo el potencial de la geotermia, que funcionaría las 24 horas de día de los 365 días del año, o incluso de la maremotriz", agrega Ben Magec.