El presidente del Cabildo de Fuerteventura, Marcial Morales (CC), y el alcalde de Betancuria, Marcelino Cerdeña (independiente), acompañarán a Josefa Hernández mañana hasta la puerta de la prisión de Lanzarote, para expresar su protesta por un encarcelamiento que creen "una tremenda injusticia".

Hernández, de 62 años, con dos hijos y tres nietos menores a su cargo, tiene que ingresar mañana en prisión por orden del Juzgado de lo Penal número 2 de Puerto del Rosario (Fuerteventura) para cumplir la condena de seis meses de cárcel que se impuso por haber construido su casa en un paraje protegido, el Parque de Betancuria.

Esta sexagenaria pagó la multa que se establecía en su condena (700 euros), pero no derribó su casa, como se le mandaba, porque asegura que no tiene otro lugar donde vivir con su familia.

Josefa Hernández comenzó ayer, miércoles, una huelga de hambre a las puertas de la sede de la Delegación del Gobierno en Fuerteventura para denunciar su situación, en una protesta que ha encontrado el apoyo de partidos de todo signo.

A lo largo de las últimas horas, más de 2.000 personas han firmado a favor de su petición de indulto y cargos públicos de CC, PP, PSOE y Podemos se han manifestado contra su encarcelamiento.

Esta tarde, cerca de un centenar de personas se han concentrado a su alrededor ante la Delegación del Gobierno para testimoniarle su solidaridad, entre ellos el presidente del Cabildo, el alcalde de Betancuria y la diputada nacional del PP Celia Alberto.

Marcial Morales y Marcelino Cerdeña no solo han anunciado que mañana irán hasta la puerta de la prisión de Tahiche con Hernández, sino que le van a ofrecer apoyo jurídico.

En concreto, los letrados del Ayuntamiento de Betancuria ya preparan en colaboración con el abogado de esta vecina un recurso de apelación ante la Audiencia de Las Palmas contra la orden que la obliga a ingresar en prisión por una condena de seis meses.