La llegada de la Lomce y su desarrollo por parte del Gobierno de Canarias están provocando una pérdida de la presencia de las enseñanzas artísticas y musicales en las Islas ante la que el profesorado de estas materias no ha permanecido indiferente. Las protestas del colectivo -y del sindicato CCOO- han surtido algún efecto, pero no tanto como para disipar la inquietud entre los docentes.

La Consejería de Educación había limitado la optatividad de la Música a un solo itinerario de Bachillerato -el de Artes Escénicas, Música y Danza-, pero después del primer encuentro con la organización sindical y los afectados, celebrado a primeros de junio, ha accedido a ofertarla también en el de Humanidades, aunque solo en segundo curso. Aún así, el profesorado entiende que la opción debería existir para todos los alumnos de la etapa, explica Juan Jesús Bermúdez, de CCOO, quien reclama que, más allá del Bachillerato, la Música "recupere la importancia que tenía en toda la Secundaria".

De hecho, el principal problema se presenta en la Secundaria obligatoria (ESO), a juicio de los representantes de los trabajadores. La reducción horaria que prevé la Lomce ha sido compensada en Canarias, "en parte", por la Consejería, al incorporar una asignatura de libre oferta autonómica en primero y segundo de la ESO- Prácticas Comunicativas y Creativas-, que implica al profesorado de Música. CCOO ha apoyado la iniciativa, pese a insistir en que palía "solo parcialmente" los efectos de la ley impulsada por el ya exministro José Ignacio Wert.

Julián Brito, profesor de Música en el IES Canarias Cabrera Pinto, ha remitido una carta a la Consejería en nombre del colectivo para pedir una reunión "con carácter urgente" antes de que acabe el calendario escolar para tratar un asunto que "preocupa enormemente y puede tener repercusiones sociales importantes".

Los profesores quieren que la ordenación de la ESO y el Bachillerato diseñada por la Administración educativa -en la que se recoge esta desaparición de la optatividad de la Música en la mayoría de modalidades- quede sin efecto, puesto que consideran que se opone a normativas de rango superior, como son la Constitución y el real decreto de diciembre de 2014 que establece el currículo básico de estas enseñanzas.

Brito hace hincapié en que la supresión de las optativas genera una disminución del horario de los docentes, "lo que puede obligar a compartir horario con otros centros", y ello deriva "en una mayor inestabilidad y dificultades en la organización de los horarios y en la implicación real de estos profesores".