El Parlamento de Canarias, con el voto de CC y PSOE, ha rechazado una moción del Partido Popular en la que planteaba una reforma fiscal "más justa" y "más competitiva" caracterizada por la bajada de impuestos, pero que los demás grupos calificaron de "interesada, populista y demagógica".

En su intervención, Jorge Rodríguez presentó 34 medidas tributarias, entre ellas, una reducción del tramo autonómico del IRPF de un punto a las rentas de hasta 33.000 euros y de medio punto a las rentas de hasta 53.000 euros, "una medida fiscal progresiva como corresponde a nuestro sistema tributario y justa", defendió.

Además, planteó propuestas de deducciones autonómicas para aquellos contribuyentes que ganen menos de 35.000 euros en su declaración individual o menos de 50.000 euros en su declaración conjunta, bien sea por familia numerosa, por adquisición de libros y material escolar no cubiertos por los servicios públicos o por enseñanza de idiomas.

A su juicio, todo esto es hacer una política tributaria "más justa, más equitativa y más solidaria" con quienes más dificultades tienen, y supone una "auténtica" reforma fiscal para una tributación "más justa" y "más competitiva" en Canarias; que afecta a la "esencia" de la estructura impositiva autonómica y supone una reforma "progresiva" en la que quienes más renta tienen, más contribuyan.

Según Rodríguez "es una reforma sensata y coherente porque Canarias no puede seguir siendo la comunidad con la tasa de paro más alta de Europa junto con Andalucía y en la que se paga un importante nivel de impuestos". En su opinión, "el Gobierno de Canarias tiene que obligarse a crear las condiciones adecuadas para que el empleo sea posible, y esta reforma fiscal es el mejor plan de empleo para Canarias".

UNA VISIÓN "INTERESADA"

Por el Grupo Mixto, Román Rodríguez dijo que la moción del PP representa una visión "interesada" de la economía para gobernar "para la minoría", de ahí que presentase una enmienda donde proponía un sistema fiscal "más progresivo" que "garantice que todo el mundo pague, sobre todo los que más tienen".

El diputado José Miguel González, de CC, también criticó la propuesta de los populares porque reducir impuestos implica "recaudar más pero en tramos muy chiquitos". Fue más allá y aseguró que cuando el PP pide que bajen los impuestos, significa una reducción de los servicios que se prestan a los ciudadanos, por lo que "están cayendo en el populismo y en la demagogia".

Por ello, también presentó una enmienda en la que planteaba esperar a ver los efectos que tendrá sobre las comunidades la modificación del sistema tributario que ha anunciado el Estado, sobre todo para ver cómo mejorar la capacidad recaudatoria sin afectar a los servicios públicos esenciales.

En cualquier caso, ambas enmiendas fueron rechazadas por el PP al entender que la política tributaria del Gobierno de Canarias ha sido un "rotundo fracaso", pues "no ha sido capaz de construir un tejido empresarial fuerte y potente y no ha conseguido procurar las condiciones necesarias para que la creación de empleo sea automática.

Por último, Jorge Rodríguez hizo hincapié en que los canarios tienen que tener "muy claro" que estas medidas se van a aplicar en las islas porque "el próximo Gobierno de Canarias, donde posiblemente estará el PP, las pondrá en marcha", un gobierno que, dijo, "no va a castigar a ningún contribuyente ni a ninguna empresa".