No son tiempos fáciles para los jóvenes que buscan un título universitario. La crisis ha impactado de lleno en las economías domésticas, cada vez en peor disposición de afrontar unos gastos de matrícula que, a su vez, han aumentado. En este contexto, las becas se consolidan como el instrumento que permite capear el temporal. Obtener una ayuda al estudio es una garantía, al menos provisional; perderla, el probable fin de una carrera universitaria. Conocer la oferta de las distintas administraciones -y también de entidades privadas- es esencial.

En Canarias conviven dos modalidades principales de becas: las del Ministerio de Educación y las del Gobierno regional. Tal vez esto parezca obvio, pero conviene recordar que no todas las autonomías becan a sus universitarios.

En el primer nivel se encuentran las ayudas del Ministerio, a las que las autonómicas deben supeditarse, puesto que son incompatibles. Constan de una parte fija y una variable, un sistema puesto en marcha hace un año y que ha complicado el procedimiento y retrasado la resolución. El plazo para pedirlas concluye el 15 de octubre.

La cantidad fija es de 1.500 euros, a la que pueden sumarse otros 1.500 si el alumno estudia fuera de su ciudad. La parte variable consta de un mínimo de 60 euros que puede elevarse en función de la renta, el rendimiento académico y los fondos disponibles. Existe, además, una beca que solo cubre el coste de la matrícula.

Los umbrales de renta varían en función del número de miembros de la unidad familiar. Para acceder a la beca de matrícula, una familia con tres miembros no puede superar los 32.697 euros anuales. En el otro extremo, para conseguir la ayuda más generosa es necesario que una familia del mismo tipo no alcance los 10.606 euros.

Además de lo complejo del sistema, el aspecto que más controversia ha generado en la convocatoria es el endurecimiento de los requisitos académicos. Un estudiante que llegue a la Universidad no podrá optar a beca de matrícula con menos de un 5,5 de nota media, ni a una compensatoria o de residencia si no llega al 6,5. En cuanto a los que ya estén en la carrera, deben aprobar todas las asignaturas para mantener la ayuda -menos de los de estudios técnicos, a los que se exige el 85%- o sumar una media de 6,5 con al menos el 80% de los créditos -el 65% y un 6 en el caso de las ingenierías.

Canarias, por su parte, ha dado este año un golpe de timón a su política de becas. Aunque mantienen la incompatibilidad con las del Ministerio, su convocatoria se ha "independizado". Si antes la Consejería esperaba a la resolución de las ayudas estatales para comenzar a resolver las suyas, ahora ha adelantado el proceso, lo que, según la Consejería de Educación, permitirá empezar a pagarlas a comienzos del próximo año o incluso a finales de este.

El plazo de presentación de solicitudes está abierto y se extenderá hasta el 1 de octubre. El impreso de matrícula para formalizar la inscripción de forma presencial puede encontrarse en la página web de la Consejería, aunque los aspirantes también tienen la oportunidad de desarrollar todo el procedimiento a través de internet.

Las modalidades son cuatro: becas de matrícula, de cuantía fija de 1.500 euros en función de la renta familiar y para sufragar el transporte a quienes cursan estudios universitarios en una isla distinta a la de residencia o fuera de Canarias.

La beca de residencia -dirigida a quienes deban vivir por razón de sus estudios fuera del domicilio familiar- también está dotada con 1.500 euros. Los umbrales de renta son diferentes para los residentes en Gran Canaria y Tenerife y los que lo hagan en otras islas, con la idea de favorecer a estos.

A diferencia del Ministerio, el Gobierno autonómico no ha modificado los criterios académicos. De hecho, sigue concediendo la beca de matrícula a los alumnos que accedan a la Universidad con una nota de entre 5 y 5,5 -quienes superen esta última nota deben pedir la ayuda del Estado- y tampoco ha elevado al 6,5 la calificación mínima para quienes ya se encuentran estudiando sus carreras. Solo están obligados a devolver el dinero los que no aprueban la mitad de los créditos (el 40% en el caso de las ciencias y las técnicas). El mantenimiento de los requisitos explica que el número de beneficiarios creciera un 52% el curso pasado hasta alcanzar los 5.319 alumnos.

Transporte y alojamiento, prioridades insulares

Por debajo de las dos grandes convocatorias de becas -la estatal y la autonómica- se despliega la oferta de los cabildos, la mayoría de los cuales apuestan principalmente, aunque no solo, por contribuir a los gastos de transporte y alojamiento.

El Cabildo de Tenerife mantiene abierta su convocatoria de becas hasta el 31 de octubre. La mayoría de las ayudas se dirige a quienes cursan grados fuera de la Isla y posgrados en cualquier universidad. Su cuantía máxima es de 6.000 euros.

Por su parte, el de La Palma subvencia a los alumnos de grado, posgrado, titulaciones en extinción y proyectos de fin de carrera en cualquier universidad. Asimismo, concede ayudas para el alojamiento en residencias de las universidades de La Laguna y Las Palmas de Gran Canaria.

El Hierro prevé cambiar los criterios de sus becas, que hasta ahora se limitaban a cubrir el transporte. Ahora la idea es que este aspecto beneficie a todos los estudiantes por igual mediante acuerdos con la naviera, mientras que las ayudas al estudio vayan en función de la renta.

En cuanto a La Gomera, ofrece ayudas de hasta 1.500 euros a quienes cursen carreras que no se imparten en Canarias, 1.200 para los que estudian en las universidades de las Islas y para los de tercer ciclo y bolsas de estudios de hasta 600 euros.

Gran Canaria destinó 115.00o euros el pasado curso a becas de posgrados y 200.000 a las de grados y licenciaturas. Otorga, además, ayudas de movilidad, de excelencia y becas préstamo.

En Lanzarote hay 626.000 euros en becas al estudio y 350.000 al transporte para los alumnos que salgan de la Isla, así como ayudas de emergencia educativa.

Fuerteventura, finalmente, dispone de cinco modalidades: subvenciones para alojamiento en la ULL, ayudas genéricas en educación, becas de movilidad, becas préstamo y ayudas para la formación práctica.

las cifras

10.606 euros. Es el máximo de renta que ha de tener una familia de tres miembros para que el alumno logre la beca de mayor cuantía del Ministerio de Educación.

1.500 euros. Es el importe de la beca de cuantía fija que concede el Gobierno de Canarias, una de las cuatro modalidades que ofrece la Comunidad Autónoma.

las claves

  • Los plazos. El Ministerio de Educación mantiene abierta su convocatoria hasta el 15 de octubre, mientras que Canarias la cierra el primer día del mismo mes.
  • Los trámites. Para solicitar la beca de Canarias hay dos posibilidades: hacerlo presencialmente (previa descarga del formulario en la web de la Consejería) y de forma telemática (para lo que es preciso disponer de DNI electrónico y lector o de certificado igital.