El sindicato independiente de educación pública en Canaria Anpe expresó ayer su temor a que el Gobierno autonómico reduzca a la mitad las clases de religión en educación Primaria en Canarias, según manifestó ayer el portavoz sindical Bernardo Huerga. Anpe ha denunciado ante la permanente del Consejo Escolar su preocupación por la repercusión laboral que puede tener esta reducción de las clase de religión, que creen que se puede producir en el curso 2015-2016, en los 600 profesores que imparten esta materia en el Archipiélago. El sindicato de enseñanza acordó además emprender movilizaciones en contra de esta política de recorte horario hacia la materia de religión católica, que se quiere llevar a cabo con motivo de los cambios que se introducirán con la aplicación de la Ley Orgánica para la Mejorar de la Calidad Educativa. Entre estas acciones de protesta, el sindicato convocará una marcha solidaria al municipio de Teror (Gran Canaria) a la que esperan que se sumen los ciudadanos grancanarios, si bien aún no ha determinado la fecha de esta protesta. En un comunicado de prensa enviado a los medios, el sindicato Anpe considera que la Consejería canaria de Educación "está actuando como una apisonadora sobre los derechos de los cristianos a recibir una formación religiosa en condiciones dignas".