Canarias ha sido la zona que mejor ha sorteado la crisis en el sector inmobiliario vinculado al turismo residencial en los seis últimos años, según un informe de Tinsa correspondiente a mayo de 2014, que señala que en este periodo los precios cayeron una media de entre un 35 y un 47,7 % en las islas.

El informe sobre el "Mercado residencia y la costa española", que ha sido hecho público hoy, señala que en Fuerteventura fue donde más cayeron los precios en este tipo de viviendas, al bajar un 47,7 % en los últimos seis años; seguida de Lanzarote, donde fue de un 44,9 % el descenso; Gran Canaria, con un 36,1 % de bajada; y Tenerife, con una caída del 35,9 %.

El plazo medio para vender una vivienda vacacional en Gran Canaria se mantiene entre los cuatro y los seis meses, señala el informe, que señala que en el casco urbano de la capital se han iniciado nuevas construcciones, a pequeño nivel, de promociones de no más de diez viviendas.

De Tenerife, el informe destaca que los principales países demandantes son el Reino Unido, Alemania y Países Nórdicos, con un aumento importante del turismo ruso, y refiere que la oferta se encuentra en manos de entidades financieras que aplican bajadas de precio superiores a los particulares, en ocasiones del 50 %, lo que determina unos plazos de venta superiores a los 12 y 14 meses para la vivienda particular.

En Tenerife no se han iniciado nuevas promociones, según Tinsa, al igual que ocurre en Fuerteventura, donde es "nula" la actividad de proyectos nuevos y existen promociones con las obras paralizadas en todas o casi todas las poblaciones costeras.

En Fuerteventura, el porcentaje de compradores extranjeros de vivienda vacacional alcanza entre el 70 y el 80 %, principalmente por parte de ingleses, alemanes y nórdicos.

El tiempo de venta se ha reducido respecto a años anteriores, y se sitúa entre los ocho y diez meses, debido al descenso de los precios de oferta y al aumento progresivo de la bolsa de inmuebles ofertados por entidades financieras, que a su vez ha dado lugar a una lento incremento de las ventas.

En Lanzarote, según Tinsa, la demanda de vivienda de segunda residencia es mayoritariamente extranjeras, y destaca el aumento por parte de italianos y franceses.

Los plazos de venta se sitúan entre los dos y los tres meses en Lanzarote, donde advierte más actividad en la demanda y las transacciones, aunque con negociaciones a la baja en el precio de venta, se están cerrando con mayor fluidez, señala el citado informe elaborado por esta compañía especializada en tasaciones.