Presidente de la CEOE desde diciembre de 2010, Juan Rosell reconoce que va a costar recuperar la confianza y defiende que la reforma laboral no tiene como característica principal la creación de empleo.

¿De verdad es creíble que España está saliendo de la crisis?

Las estadísticas dicen que después de muchos años de decrecimiento, este año vamos a tener un crecimiento de alrededor de un 1% y con creación de empleo.

¿Se recupera la confianza?

Un poquito. Va a costar porque estamos muy desconfiados todos. Salir de una crisis como la que hemos tenido va a ser complicado hasta que no recuperemos el índice de empleo.

¿Cuántos años costará llegar a una situación similar a la de antes de la crisis?

Mucho. Tenemos casi cinco millones de parados, por tanto si recuperamos medio millón cada año, solo hace falta hacer matemáticas.

Los gobiernos central y canario están enfrentados por la Ley de Renovación y Modernización Turística. ¿Comparte la preocupación de sus compañeros?

Creo en legislación concreta para los lugares concretos, y especialmente para sectores tan importantes para Canarias como el turismo.

¿Aprecia irresponsabilidad por parte de los dos gobiernos por no llegar a un acuerdo?

Cuando las cosas son de cajón las posturas convergen siempre. Lo que pasa es que, a veces, tardan más tiempo. Tanto uno como otro tienen que hacer declaraciones, y cuando se hacen declaraciones, normalmente, nos liamos y después hay que dar marcha atrás en cosas que hemos dicho precipitadamente.

¿Flexibilizaría la normativa sobre el territorio en las Islas?

Estamos absolutamente de acuerdo en lo que diga la patronal canaria.

Pero contribuiría a fortalecer el sector turístico y a recuperar la construcción.

Son los dos puntos clave que han tirado de la economía de Canarias y de España. Y están mejorando en estos momentos.

¿Reconoce otro potencial en Canarias que no sea el turístico?

Es muy difícil crear un sector que tenga ese porcentaje de PIB de hoy para mañana. Lo que se puede seguir haciendo es nichitos. Hay sitios en el mundo muy extraños en los que están saliendo empresas muy importantes que luego se expanden, sobre todo ahora con internet y las nuevas tecnologías.

Hay quien sigue pensando que no se está diversificando.

Pues esa gente que se queja que empiece a hacerlo. Y que digan cómo y de qué manera, porque una cosa es predicar y otra dar trigo. Lo que hay que hacer es un contorno empresarial fácil, dar solución a los problemas, reducir la burocracia... Todo eso sumado da como consecuencia que haya más gente que se quiera plantear hacer empresa y ser empresario.

Otro de los enfrentamientos es por el petróleo. ¿Cuál es su visión?

La clave es la información. Vamos a analizar el tema, dónde se hace en el resto del mundo, qué ventajas e inconvenientes hay, qué técnicas... No opinemos antes de saber exactamente todo, y creo que eso es lo que están haciendo tanto el Gobierno de aquí como el de Madrid. No hagamos declaraciones sin ton ni son, porque después es muy difícil tirarte para atrás.

Lo mismo aquí que en Baleares.

Y para Tarragona, donde hay prospecciones muy importantes. En el mundo hay miles y miles de prospecciones con sus riesgos, sin duda, pero vamos a analizar qué tipo de petróleo hay.

Sobre este asunto el Ejecutivo canario ha iniciado el trámite para convocar una consulta popular.

Esto de las consultas lo estamos poniendo de moda. Es una manera de hacer a la que aquí no estamos del todo acostumbrados. Es una posibilidad que si queremos ponerla en marcha por parte de todos, ahí están los políticos para decir de qué manera lo hacemos. Pero no hagamos preguntas y respuestas así por las buenas que ya no tengan marcha atrás.

¿La ve equiparable a la catalana?

Absolutamente distinta.

¿Puede perjudicar el enfrentamiento Canarias-Estado a las empresas de las Islas?

No. Al final las cosas se pactan. En este país somos todos pactistas y hacemos lo que mejor que creemos para los ciudadanos.

Canarias cerró 2013 como la comunidad con la segunda tasa de paro más alta. ¿Tiene una solución a corto o medio plazo?

El problema de España es el paro, y el déficit. Pero España fue el país que creó más empleo entre el 2000 y el 2007. Después también hemos sido récord en cuanto a destrucción. Hay que tener paciencia.

¿Tendrá más problemas el Archipiélago?

Como todos los sitios. Hay ventajas de una cosa y de otra. Es un buen año turístico y si el turismo arrastra la construcción y la construcción la industria todo va a ir un poquito mejor.

La criticada reforma laboral no ha contribuido a rebajar el paro como se esperaba.

La no reforma laboral antes de 2012 provocó más destrucción de empleo que otra cosa. La reforma laboral no trae como consecuencia la creación de puestos de trabajo, sino que una de sus características era la no destrucción de más empleo. (...) Ojalá que el acuerdo de modelación salarial para 2012, 2013 y 2014 lo hubiésemos hecho antes. Lo que no hicimos bien es que en los años 2008 y 2009 nuestros salarios crecieron dos y tres puntos por encima del IPC. Fue una barbaridad.

¿Falta dar una vuelta de tuerca más a la reforma?

No es problema de tuerca. Es un problema de la economía, cuáles son las posibilidades de las empresas, cómo deben modernizarse y adaptar la situación de la realidad a la legalidad. Desde el Estatuto de los Trabajadores hemos hecho 35, y tenemos que hacer todas las que hagan falta.

¿Entiende la desconfianza que existe entre los trabajadores hacia la clase empresarial?

Los que tienen un puesto de trabajo indefinido no lo dicen. Los que probablemente se quejan más son los que tienen un puesto de trabajo temporal y los que se quejan muy mucho son los que están en paro.

¿Teme que el Gobierno del PP, por miedo a futuros resultados electorales, no aplique las reformas que se le piden?

España es el país de Europa que más reformas está haciendo. En eso soy optimista. Nos hemos empezado a mover y los organismos internacionales que evalúan lo que hace cada país nos dan una nota positiva.

O sea que el Gobierno sigue el camino correcto.

No este Gobierno. Y el anterior. En España nos hemos movido después de la crisis. Primero no nos enteramos, pero después hemos hecho movimientos en el sentido correcto.

Proponen bajar impuestos y luchar contra la economía sumergida.

El combate contra la economía sumergida es importante y decisivo. En relación con la bajada de impuestos hemos hecho un planteamiento de reforma fiscal muy amplio. Decimos que la creación de empleo se ve perjudicada porque nuestras cotizaciones sociales son más altas que en Europa.

¿Han superado el palo que supuso la condena al anterior presidente?

Fue un momento difícil. Lo hemos tenido que asumir. Estamos intentando ser modélicos, pero de ahí a conseguirlo...

¿Ha notado desconfianza?

Las encuestas no nos dejan lo mejor posible, pero la gente va notando que hay una mejora.

¿La independencia económica de las organizaciones contribuirá a ello?

Eso es clave. Esa va a ser la línea de futuro.

Se negocia el nuevo REF. ¿Por dónde debe caminar?

Entiendo la singularidad de Canarias y, por tanto, estoy absolutamente de acuerdo en incentivar las posibilidades económicas de Canarias.