Un trabajo liderado por investigadores del IMIM (Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas), con la colaboración de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), y publicado en la revista "Plos One", concluye que incorporar la medida de la circunferencia de la cintura en la práctica clínica, junto con las medidas tradicionales de peso y altura, permitiría detectar más fácilmente los niños y adolescentes con riesgo cardiometabólico, es decir aquellos que tendrían más predisposición a padecer arteriosclerosis o diabetes tipo 2.

El estudio es el primero que se realiza en el ámbito español sobre obesidad abdominal en niños y adolescentes, uno de los factores de riesgo más importantes relacionado con este trastorno y que ha aumentado en los últimos años.

Los investigadores han analizado los datos de 1.521 niños y adolescentes españoles de entre 6 y 17 años que habían participado en el estudio ENKID sobre nutrición y hábitos alimentarios y han medido la proporción de obesidad abdominal tanto en aquellos que tenían un peso normal como los que tenían sobrepeso. Por ello, han utilizado la medida de la circunferencia de la cintura y el peso -lo que se denomina ratio cintura/peso-, un indicador totalmente independiente de la edad y el sexo, y que estima que existe obesidad abdominal cuando el resultado es igual o superior a 0,5.

Según Helmut Schröder, investigador del grupo de investigación en riesgo cardiovascular y nutrición del IMIM y del centro de investigación biomédica en red (Ciber) de Epidemiología y Salud Pública, "en España, un 21,3% de los niños de 6 a 11 años y un 26,8% de los adolescentes de 12 a 17 años tienen obesidad abdominal".

Del total de niños españoles con peso considerado normal o con ligero sobrepeso, un 7,5% de los de peso normal presentan obesidad abdominal y del grupo de niños con sobrepeso la presentan un 49,2%. Todos ellos no habrían sido identificados con los métodos tradicionales de cribado. Lo mismo ocurre con los adolescentes: un 1''8 tienen peso normal y un 44,1% tienen sobrepeso y tampoco habrían sido detectados".

A diferencia de lo que podemos pensar, explica Lluís Serra-Majem, investigador del Departamento de Ciencias Clínicas de la ULPGC y del Ciber de Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición, "hay personas, tanto adultas como jóvenes, que a pesar de tener un peso completamente normal tienen obesidad abdominal y a la inversa, personas con sobrepeso, que tienen la grasa repartida por todo el cuerpo y por lo tanto un menor riesgo cardiometabólico".

La grasa abdominal es importante a la hora de padecer enfermedades cardiovasculares o metabólicas en edades muy tempranas y se ha visto que con las medidas tradicionales hay un porcentaje de niños y adolescentes que no son detectados y que tienen este riesgo. Los investigadores creen que es necesario incorporar la circunferencia de la cintura como una medida más dentro de la práctica clínica rutinaria, una medida fácilmente aplicable, sin coste adicional y que tomaría solo unos minutos a los facultativos.