El pleno de la Eurocámara aprobó ayer una nueva directiva para reforzar la seguridad en las perforaciones petrolíferas y gasistas en alta mar. El objetivo es evitar que se repita una catástrofe como el vertido de BP en el Golfo de México, tras el estallido de la plataforma Deepwater Horizon, en 2010.

Las empresas petrolíferas y de gas serán plenamente responsables de los daños medioambientales que causen a las especies marinas protegidas y a los hábitats naturales. Y deberán demostrar que tienen suficiente capacidad financiera para cubrir las consecuencias de un posible incidente.

Antes de empezar cualquier perforación, los operadores tendrán que realizar un análisis de riesgo completo y preparar un plan de emergencia de respuesta, que será examinado por la Agencia Europea de Seguridad Marítima. Y la actividad sólo podrá empezar tras la aprobación por parte de una autoridad nacional independiente.

Las empresas que operen en aguas comunitarias deberán demostrar además que su política de prevención de riesgos se aplica también fuera de la UE.

Además, la Eurocámara rechazó una enmienda en la que se pedía prohibir perforaciones en áreas cercanas a zonas turísticas. Para el eurodiputado del PP Gabriel Mato, este resultado supone un aval para Canarias de cara a los futuros sondeos para comprobar si existe petróleo en aguas situadas entre las Islas y Marruecos.

"Me alegro del avance que supone este acuerdo, y especialmente en un momento en el que el debate está abierto en Canarias, porque algunos con responsabilidades políticas pero con una actitud irresponsable tratan de impedir cualquier actividad sin más argumentos que sus propios intereses políticos y electorales", dijo Mato.