Este año será mejor que el pasado, pero eso no significa que vaya a estar exento de problemas y más sacrificios, advirtió el presidente regional, Paulino Rivero, en su tradicional discurso de fin de año.
Rivero eligió Betancuria, en Fuerteventura, para dirigirse a los canarios esta vez poco antes de la medianoche del 31 de diciembre.
El presidente dejó claro una y otra vez que es consciente de los problemas que atraviesan las familias y las empresas del Archipiélago.
Se refirió, en particular, a asuntos como el desempleo, la espera de las ayudas sociales de los dependientes, las dificultades de los pequeños negocios y las amenazas de desahucio, a quienes dirigió "de corazón" su apoyo, solidaridad y compromiso.
Rivero remarcó que es "muy duro" gestionar recursos "tan escasos" y apuntó que "ni política ni personalmente es fácil tomar decisiones que tantas veces provocan situaciones individuales y familiares traumáticas", consciente también de las numerosas protestas habidas en los últimos meses por la aprobación de los nuevos recortes presupuestarios para 2013 en el ámbito de la comunidad.
La nota de optimismo llegó cuando apuntó que "Canarias lleva ya dos años dando señales de mejoría" y que, "aunque queda un largo camino por andar, 2013 será mejor que 2012". Eso sí, "más lento de lo que quisiéramos, pero avanzamos hacia un tiempo mejor".
En el discurso, "garantizó" que "somos muchos los que vamos a defender con uñas y dientes un sistema de servicios públicos esenciales, que garantiza la igualdad de oportunidades a los canarios de todas las Islas", en otro guiño a los numerosos colectivos que han protestado en la última parte de 2012 por las restricciones presupuestarias que el Ejecutivo aprobó para este año.
"Todo es mejorable, es cierto. Pero tenemos una buena sanidad pública. Y un buen sistema educativo", replicó a quienes han venido en los últimos meses protestando por el deterioro de la calidad de las prestaciones de los servicios públicos, en particular, los propios empleados de la comunidad y los sindicatos del área de educación y sanidad.
"Hay que defender y creer en lo público, en los servicios que reciben los que menos tienen", remarcó. "Por eso seguiremos dejándonos la piel: para que ningún canario se vea privado de ser atendido por un buen médico o educado por un buen profesor".
Rivero también recordó que se opone a las prospecciones petrolíferas, tema del que ha hecho causa y que en Fuerteventura, desde donde se dirigió a los ciudadanos, y también en Lanzarote, es un tema particularmente sensible, pues es frente a sus costas donde están autorizadas.
El mandatario autonómico expresó su deseo "por una Canarias saludable, habitable, sostenible" antes de hablar de una Canarias "de aguas limpias, a salvo de las mareas negras que arrastran consigo quienes dan la espalda al interés de los canarios y de sus instituciones".