El viceconsejero de Turismo del Gobierno canario, Ricardo Fernández de la Puente, ha asegurado hoy que la nueva Ley de Renovación y Cualificación Turística de Canarias agilizará los trámites para la renovación y cualificación de los establecimientos del archipiélago.

Fernández de la Puente, que ha participado hoy en una jornada divulgativa del "Plan de modernización, mejora e incremento de la competitividad de San Bartolomé de Tirajana", ha adelantado que la futura normativa buscará "la cualificación de las urbanizaciones, núcleos y productos turísticos de Canarias".

Para ello, será preciso la renovación y diversificación de la oferta, la especialización de usos y la modulación del crecimiento de la planta turística.

Ricardo Fernández ha explicado que el Ejecutivo regional considera que la cualificación del espacio turístico "va más allá de los establecimientos privados", por lo que califica como "fundamental" apostar por la renovación urbana, mediante intervenciones públicas y privadas.

La futura ley contemplará como excepciones a los límites del crecimiento de plazas de alojamiento en Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria y Tenerife, los proyectos con licencia urbanística que tengan por objeto la renovación del establecimiento turístico y la materialización de plazas turísticas procedentes de ese tipo de proyectos.

También acogerá a los hoteles de categoría cinco estrellas gran lujo, los establecimientos de alojamiento en cualquier modalidad y tipología que provengan de las operaciones de especialización de usos programados por el planeamiento, con la finalidad de separar los usos turísticos y residenciales.

Esta ley sucederá a la prórroga de la Ley de Medidas Urgentes, que finaliza el 13 de diciembre del 2012.

Los nuevos establecimientos alojativos deberán acreditar la previa suscripción de un convenio con el Servicio Canario de Empleo (SCE) para que, al menos durante seis años desde la apertura, el 70 por ciento de los trabajadores sea seleccionado y formado por el SCE.

El viceconsejero de Turismo ha precisado que, para incrementar el proceso de cualificación, la nueva ley ajusta la gama de incentivos que la Ley de Medidas Urgentes preveía.

Así, a los incentivos en materia de plazas adicionales se añaden los de incremento en la edificabilidad y cumplimiento matizado de los estándares de densidad de parcela a los establecimientos que ahora procedan a la renovación, además de la posibilidad de aplicar otros de carácter económico.

Fernández de la Puente ha considerado que la ley parte del deber que tienen los titulares de establecimientos y actividades turísticas de mantener, conservar, mejorar y rehabilitar los inmuebles e instalaciones en las condiciones requeridas para el uso efectivo establecido por la normativa turística y el planeamiento.

La nueva ley pondrá en marcha, además, un mecanismo de control indirecto y a cargo de los titulares consistente en la obligación de presentar periódicamente ante la administración un informe, a emitir por entidades acreditadas, sobre el estado de conservación y uso efectivo de los establecimientos.

Otro de los desafíos que aborda la nueva regulación es la reconducción de la residencias en los establecimientos turísticos, que afectan a varias zonas de los núcleos turísticos.