La Universidad de La Laguna (ULL) espera que la última bajada de los sueldos en un 5% decretada por el Gobierno de Canarias y la contención de los gastos en el centro puedan evitar despidos entre el profesorado, una medida que sería inevitable si hay una "reducción drástica" de los presupuestos destinados a las instituciones académicas del Archipiélago.

El rector de la ULL, Eduardo Doménech, expresó ayer su confianza en que la subida de impuestos acordada por el Ejecutivo regional permita amortiguar la disminución de los recursos financieros de las universidades. "Si no hay esa reducción drástica, posiblemente con la bajada de sueldos y los ajustes en el gasto no tengamos que despedir a ningún trabajador", indicó Doménech.

Por el contrario, si la reducción es muy importante y no puede compensarse con el aumento impositivo, los centros de enseñanza superior se verán "abocados" a prescindir de personal.

Cabe recordar que la Dirección General de Universidades ha estimado que, de aplicarse mecánicamente el decreto ministerial sobre gasto educativo, la ULL y la ULPGC tendrán que despedir a unos 400 docentes no titulares.