El Gobierno canario planteará a todos sus empleados renunciar a parte de su paga extra de diciembre y, en el caso de los no fijos, reducir además su jornada y sueldo para ajustar sus cuentas sin hacer despidos, ha anunciado hoy su consejero de Presidencia, Francisco Hernández Spínola (PSOE).

Solo el recorte de paga extra que se baraja, que se aplicaría eliminando dos de los complementos que se abonan en ella y no su cuantía total, permitiría ahorrar 65 millones de euros al Ejecutivo, que todavía no tiene datos sobre cuánto ahorraría con la reducción de jornada y salario que propone para el personal laboral no fijo, según ha explicado Hernández Spínola.

El consejero, que ha dado a conocer sus propuestas tras plantearlas a representantes sindicales de los 60.000 empleados que dependen directamente de la comunidad autónoma, y entre los que no se incluyen los de sus empresas públicas, las ha defendido con el argumento de que son la única vía para evitar despidos, después del ajuste a que obligan los recortes en los Presupuestos del Estado.