El secretario general de la Universidad de La Laguna (ULL), Juan M. Rodríguez Calero, se reunió ayer con un grupo de alumnos afectados por el retraso en la resolución de las becas del Gobierno de Canarias para explicarles la postura de la institución académica acerca de la dilación que sufre la tramitación de estas ayudas y aclararles, en este sentido, que no se les obligará a abonar las tasas de matrícula hasta el 15 de mayo.

A fecha de hoy, la Universidad aún no ha recibido siquiera el listado provisional de denegados a las becas solicitadas, una cuestión cuya entera responsabilidad, recuerda, recae en el Ejecutivo regional pero que afecta a unos 4.000 alumnos peticionarios de este centro académico.

En este punto, el secretario general quiso tranquilizar a los estudiantes, a quienes transmitió que la normativa que regula el procedimiento de matrícula indica que, una vez recibido el listado provisional de becas denegadas, los alumnos disponen del plazo de un mes para regularizar la matrícula, lo que hasta el momento no ha sucedido. En cualquier caso, los estudiantes deberán estar al corriente de sus pagos antes del 15 de mayo como fecha tope.

"Ni una ni otra circunstancia se dan por el momento", comentó Rodríguez Calero, así que los alumnos considerados como becarios condicionales "pueden estar tranquilos". En estos momentos, la ULL y la Consejería de Educación, Universidades y Sostenibilidad del Gobierno de Canarias están negociando la compensación del perjuicio económico que sufre la institución universitaria debido a la no percepción de las tasas de matrículas imputable a este retraso, y que afecta directamente a su previsión presupuestaria.

Si llegara la fecha tope indicada y el Gobierno aún no hubiera resuelto esta cuestión, la ULL buscará la manera de solucionarla intentando no lesionar los intereses de los estudiantes.

La demora en la tramitación de las becas ha coincidido con la desaparición, decidida por el Ejecutivo como medida de ahorro, de la Fundación Canaria para la Promoción de la Educación (Proeduca), que se encargaba anteriormente de este cometido.