El consejero regional de Obras Públicas, Transportes y Política Territorial, Domingo Berriel (CC), ha apelado hoy al Ejecutivo central para que adopte una "actitud democrática" y "corrija" su decisión sobre los sondeos petrolíferos autorizados a Repsol en aguas próximas a las islas.

Domingo Berriel ha dicho, además, que desde las islas se "ha hablado alto y claro de forma pacífica, pese a lo que ha sido una auténtica provocación del Gobierno central a la soberanía del pueblo canario", tras las manifestaciones del pasado sábado, cuyo seguimiento en Lanzarote ha calificado de "impresionante" y ha cifrado en entre 25.000 y 30.000 personas.

El consejero ha señalado que la capital de Fuerteventura, en Puerto del Rosario, donde él estuvo al igual que el vicepresidente del Gobierno, José Miguel Pérez (PSOE), la protesta fue seguida por entre 10.000 y 12.000 personas, por lo que esta respuesta, al igual que la dada por los ciudadanos en las demás islas y en Las Palmas de Gran Canaria, que también ha señalado que fue muy numerosa, "se ha de tener en cuenta".

Berriel ha insistido en que la movilización de los canarios "ha sido contundente" y ha rechazado el razonamiento hecho por el PP al comparar los votos que obtuvo en las islas en las pasadas elecciones autonómicas y locales con los asistentes a las protestas, algo que "nadie se cree".

También ha calificado de "tinta de calamar" y de "fuegos de artificio" la reacción del PP, tanto por su crítica a la ausencia en la manifestación del presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, quien ya había anunciado que iniciaba un viaje oficial a Uruguay, como por solicitar su dimisión.

Los miembros del Gobierno estuvieron en las protestas porque la decisión adoptada por el Ejecutivo central supone "un agravio y un problema para Canarias, que ha recordado que se acordó pese a la oposición expresada por el Gobierno canario, su Parlamento, los cabildos de Lanzarote y Fuerteventura, entre otros, y numerosos ayuntamientos.

El Gobierno del PP, que no atendió a las alegaciones presentadas por las instituciones canarias contra la autorización de los sondeos, debe "poner el oído y corregir a tiempo", pues de lo contrario habrá más manifestaciones y serán más numerosas", ha argumentado Berriel.

Los datos de la Delegación del Gobierno en Canarias rebajan el seguimiento de las manifestaciones citadas por el consejero de Obras Públicas a 9.000 personas en Arrecife, 3.000 en Puerto del Rosario y 1.500 en Las Palmas de Gran Canaria.