La delegada del Gobierno en Canarias, María del Carmen Hernández Bento, rebatió ayer las cifras aportadas a lo largo de los últimos días por el presidente canario, Paulino Rivero, sobre el número de extranjeros que llegan a Canarias para trabajar, y dijo que, a lo largo de 2011, se concedieron 1.579 autorizaciones de residencia y trabajo a ciudadanos extracomunitarios.

Rivero había manifestado, tanto en el transcurso del Debate sobre el Estado de la Nacionalidad Canaria como en su blog, que en las Islas se "habían generado 6.000 empleos, pero, como han llegado 20.000 extranjeros, el paro crece en 14.000 personas".

Además, había remarcado que "con estos datos, y con este ejemplo, se pone de relieve que la economía canaria no tiene capacidad para dar trabajo a tanta gente".

Hernández Bento precisó que de las 1.579 autorizaciones concedidas en 2011, 234 corresponden a residencias temporales y trabajo por cuenta ajena y tres por cuenta propia, que se conceden siempre que la situación nacional de empleo permita su contratación.

Al margen de este requisito, explicó Bento, también se requiere para conceder este tipo de autorización no encontrarse irregularmente en territorio español; carecer de antecedentes penales; encontrarse inscrito en la Seguridad Social y poseer capacitación y cualificación profesional suficiente para el ejercicio de la profesión, entre otras consideraciones.

Los 1.342 expedientes restantes son permisos de residencia temporal por reagrupación familiar. De ellos, 720 corresponden a cónyuges o pareja con relación análoga a la conyugal, y 622 a hijos menores cuyo representante es el reagrupante. "Y los menores no pueden trabajar ni engrosar las listas del paro de ninguna de las maneras", ironizó Bento.

Estas últimas autorizaciones, explicó la delegada, implican residencia temporal en España y otorgan, además, la posibilidad de trabajar sin necesidad de trámites administrativos posteriores, aunque "no implican" la inmediata incorporación al mercado laboral. Es decir, un cónyuge reagrupado puede residir en España "sin necesidad ni intención" de incorporarse al mercado de trabajo.

Por este motivo, la delegada dijo "no entender" de dónde saca Rivero las cifras que defiende, y lamentó que haya "querido dar a entender" que el empleo que se genera en las Islas lo ocupan las personas que vienen de fuera.

"Es imposible vincular paro a ciudadanos extracomunitarios, pues todos tienen que venir con permiso de trabajo", precisó Hernández Bento. "Este mensaje lo encuentro confuso", aseveró, porque lo cierto es que "hay muchísimos canarios que han perdido su empleo y que Canarias tiene el porcentaje más alto de paro de España".

Las declaraciones de la delegada se produjeron, además, después de que los grupos que sustentan al Gobierno, CC y PSOE, aprobaran, en el Debate sobre el Estado de la Nacionalidad Canaria, una propuesta de resolución en la que se pide al Gobierno de Canarias que inste al Ejecutivo estatal a adoptar "cuantas medidas reglamentarias y ejecutivas sean precisas para limitar los nuevos permisos de trabajo y residencia a extranjeros no comunitarios a los estrictamente necesarios, previa consulta con las organizaciones sindicales y empresariales".

En este sentido, y usando como argumento las cifras citadas con anterioridad, Hernández Bento dijo que "no tiene sentido" negociar los cupos de extracomunitarios, tal y como solicitan CC y PSOE.