La jornada de huelga en la sanidad pública canaria convocada ayer por CCOO, UGT, Satse, Sepca y Cesm se saldó sin prácticamente ninguna repercusión en el desarrollo ordinario de la actividad de los hospitales y centros de salud de Canarias. Es más, la mayor parte de los pacientes que ayer tenían alguna consulta, prueba o intervención fueron atendidos sin mayores problemas e incluso con mayor puntualidad que de costumbre, debido fundamentalmente a los servicios mínimos establecidos por la Consejería.

Aunque Sanidad estimó en un 8,9% el seguimiento de la protesta, asegurando que de los 9.911 efectivos que podían ejercer su derecho a la huelga solo 884 la secundaron, los sindicatos elevaron este porcentaje hasta el 75%, si bien reconocieron que no contaban con datos reales porque no tenían acceso al fichaje de los trabajadores y que era "una impresión".

Los sindicatos mantienen que el seguimiento fue "masivo", ya que argumentan que los servicios mínimos dejaban poco margen para que fuera una protesta más visible.

"Si de diez trabajadores que forman un servicio, Sanidad solo autoriza que acuda a la huelga uno, nosotros entendemos si ese va es un 100% del seguimiento, mientras que para ellos es un 10%, de ahí que para nosotros sea de cerca de un 80% y ellos digan que un 8%", explicaba ayer en una rueda de prensa de valoración el portavoz de CCOO, José Alonso Rodríguez Tapia, que insistió en que se la cuentas de la Consejería "no están bien porque solo se pueden contar aquellos trabajadores a los que no les afecta los mínimos".

En esta línea se expresó el portavoz del sindicato de enfermería Satse, Leopoldo Cejas-Fuentes, que aseguró que "los datos aportados por la Consejería intentan confundir a la opinión pública y no se ajustan a la realidad", puesto que "si tan solo el 9,54 % de los enfermeros han secundado la huelga, como asegura la Administración, habría en el Servicio Canario de Salud una plantilla de 18.000 enfermeros, cuando la realidad es que no alcanzan los 9.000 profesionales".

En cualquier caso, en los centros de salud y hospitales de toda canarias la protesta fue prácticamente imperceptible para los usuarios, de no ser por las concentraciones que se realizaron a las puertas de dichos centros, que fueron masivas y a las que asistieron no solo los profesionales sanitarios, sino también numerosos pacientes.

Es más, los pacientes incluso notaron una agilidad impropia de los servicios, algo que parece lógico si se tiene en cuenta que muchos pacientes anularon las citas que tenían y las trasladaron a mañana o los próximos días por si acaso la perdían y que la gran mayoría de los médicos especializados avisaron con antelación a los interesados para que no acudieran a sus servicios.

Habrá más protestas

Pero la jornada de huelga de ayer no será la última protesta que se lleve a cabo, así el portavoz de UGT, Francisco Bautista, aseguró que "es solo el comienzo, porque los profesionales, pero también la ciudadanía, tiene que salir a la calle para dejar claro que basta y que no van a permitir que se acabe con un derecho fundamental como es el de la sanidad".

No obstante, Intersindical Canaria, sindicato que no apoyaba la huelga de ayer pero que rechaza de plano los presupuestos de la Consejería de Sanidad para el próximo año, hizo ayer un llamamiento a los convocantes de este primera protesta a realizar "una convocatoria seria y unitaria de huelga para la tercera semana de diciembre en la que, además, los usuarios tengan una participación activa en torno a una jornada íntegra en todas las Islas de protesta en defensa de la sanidad pública".

A estas movilizaciones, a las que habría que sumar las concentraciones que se realizan semanalmente ante de los centros sanitarios, es probable que se unan otras tres jornadas de protesta del personal no médico convocadas por la Asamblea 7 Islas e incluso otra más, esta vez convocada por el Sindicato de Médicos de Canarias.

"Hasta el 12 diciembre da tiempo de hacer de todo", recordó ayer el representante de CCOO.