Las listas de espera del Hospital Universitario de Canarias (HUC) se incrementarán en alrededor de 1.800 personas entre el mes de octubre y diciembre de este año como consecuencia de la supresión de las actividades extraordinarias, ya que hasta la fecha se venían realizando una media de 600 intervenciones al mes dentro del programa de tarde.

En concreto, entre los meses de enero y julio en el centro hospitalario se realizaron alrededor de 600 consultas, operaciones o pruebas diagnósticas al mes en horario de tarde, cifra que disminuyó entre julio y septiembre hasta las 400, como consecuencia del cierre de los quirófanos de Cirugía Mayor Ambulatoria (CMA) también en horario de tarde, y a partir del 1 de octubre y hasta el 31 de diciembre esa cifra pasará a ser de cero.

De esta manera, el número de personas en lista de espera tanto quirúgica como de especialidad médica en el HUC pasará de las 5.380 que se registraron a fecha 30 de junio a más de siete mil.

"Hay que tener en cuenta que a la gente que ya estaba en lista de espera ordinaria ahora se sumará, y en muy poco tiempo, toda la que estaba incluida en la actividad extraordinaria de tarde y que eso va a ser un impacto notable", explicaba ayer el portavoz del Sindicato Médico CESM, Levy Cabrera, antes de recordar que "el índice de ocupación, es decir, el número de estancias en un periodo concreto dividido entre el número de camas disponibles por el número de días ingresados, es superior al 75% durante la mañana, cuando un dato óptimo sería un 60%".

Además, durante el año 2010 el HUC ya consiguió optimizar las intervenciones quirúrgicas sumando 800 más solo en horario de mañana, fundamentalmente gracias a la reducción del tiempo entre una intervención y la siguiente.

Por todo esto, los trabajadores del HUC aseguran que por mucho que se trabaje en horario de mañana -dejando claro que ya no queda demasiado margen de maniobra-, nunca se conseguirá absorber a los miles de pacientes que se estaban tratando habitualmente por la tarde.

"Los programas de tarde se crearon principalmente para reducir la lista de espera en aquellas consultas, pruebas diagnósticas o intervenciones quirúrgicas en donde más atasco había, así que ahora lo que no se puede pensar es que si se suprimen no va a subir la lista de espera", subraya Cabrera, que detalla que este tipo de refuerzos son necesarios en consultas de especialidades tales como oftalmología, otorrinolaringología, ginecología y, sobre todo, en rehabilitación".

No obstante, en el HUC también se hace necesario con carácter general aumentar el tiempo de funcionamiento de pruebas como la resonancia magnética.

"Además de que la lista de espera va a crecer, quizás lo peor es que el retraso también lo hará y nos vamos a encontrarnos con pacientes que tendrán que esperar un año, dos o tres para ser atendidos", concluye el sindicalista.

Por su parte, desde la dirección del HUC se sigue insistiendo en que "como en el resto de hospitales, la prioridad es aumentar el rendimiento en la actividad de mañana optimizando los recursos y dotaciones de forma continuada".

Así, añaden que "otro de los aspectos en los que se está trabajando es facilitar la jornada ordinaria en horario de tarde. Ya se han recibido solicitudes para trabajar en horario de tarde en lugar de por la mañana por parte de algunos profesionales médicos y del resto de los profesionales necesarios".

No obstante, la dirección del centro hospitalario reconoce que con el objetivo de minimizar el impacto de la supresión de parte de la actividad hasta final de año, "también se está trabajando en los protocolos de lista de espera quirúrgica".