"Tercermundista". Así definen los sindicatos el procedimiento que se emplea en Canarias para asignar las plazas que quedan vacantes en los ciclos de grado medio y superior de Formación Profesional, conocido como "subasta", un acto público al que acuden los alumnos que se encuentran en lista de espera para tratar de hacerse con alguno de los puestos que no han sido confirmados por sus "adjudicatarios" originales.

La "subasta" se desarrolló ayer en los 102 centros que ofrecen ciclos de FP en el Archipiélago, y en algunos de ellos generó un auténtico colapso. Alrededor de 700 jóvenes, por ejemplo, se congregaron en el IES Los Gladiolos de Santa Cruz de Tenerife. Según fuentes del centro consultadas por el sindicato Docentes de Canarias-Insucan, la afluencia de alumnos fue mayor que nunca.

El salón de actos se quedó pequeño para acoger a este volumen de estudiantes, muchos de los cuales tuvieron que permanecer en el exterior, con las consiguientes dificultades para escuchar cuando eran nombrados para ocupar una de las plazas.

Naira Rodríguez, una de las alumnas afectadas, había pedido plaza en tres ciclos: Atención Sociosanitaria, Educación Infantil e Imagen para Diagnóstico. En ninguna de ellas lo ha conseguido. "Otros centros que imparten estos ciclos están en el otro lado de Tenerife y en otra isla, y no me lo puedo permitir", explica. Paradójicamente, agrega, centros como el de Tejina han suprimido alguna de estas enseñanzas -Educación Infantil- por no reunir el número de alumnos suficiente. "No hay sitio donde estudiar", se lamenta.

Si se tiene en cuenta que el de Los Gladiolos es solo uno de los centros en los que se ofertan estudios de FP, las previsiones sindicales sobre el número de jóvenes que puede quedarse sin plaza -unos 10.000- no parecen ir muy desencaminadas, aunque cabe recordar -tal y como precisa la Administración- que la oferta no está cerrada y que en septiembre pueden crearse más grupos.

Respecto al sistema de subasta, José Ramón Barroso, de CCOO, volvió ayer a expresar su sorpresa por que siga empleándose cuando incluso la Dirección General de FP se había comprometido el año pasado a revisarlo. "El alumno tiene que acudir al centro, pero puede haber pedido una segunda opción en otro, por lo que si es en éste último donde hay plazas vacantes, no puede acceder a ellas", argumentó. La solución pasaría, a su juicio, por el uso de las nuevas tecnologías.