La Universidad de La Laguna (ULL) da un paso adelante y otro atrás en una de las clasificaciones que miden la calidad de las universidades españolas, la elaborada por la Fundación CyD (Conocimiento y Desarrollo), presidida por Ana Patricia Botín. La última edición de este estudio, correspondiente al año 2010, asigna a la institución académica tinerfeña un puesto en calidad docente ligeramente inferior al que ocupaba en la clasificación de 2008 -la última publicada-, mientras que le concede una mejora también leve en calidad investigadora.

En concreto, la ULL pasa del puesto 37 al 40 en el ranquin de calidad docente, mientras que se adelanta del 34 al 30 en el que analiza la calidad de la investigación. El informe de la Fundación CyD estudia la actividad docente, investigadora y la capacidad de atracción, entre otros aspectos, de 47 universidades públicas presenciales españolas. En él tampoco sale bien parada la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), que ocupa el puesto 45 en calidad docente -el mismo que hace dos años- y el último en investigación (el 45 en 2008).

Pese al retroceso en la enseñanza, hay algunos indicadores de la ULL que representan una cierta mejoría respecto a años anteriores. Es el caso de la tasa de rendimiento de los estudiantes -porcentaje de créditos aprobados sobre los matriculados-, que evoluciona desde un 55,4% a un 58%, aunque continúa siendo de los más bajos del país y no supone un avance en relación al resto de universidades.

De hecho, la Universidad lagunera ocupa ahora el puesto 40, cuando en 2008 ostentaba el 39. La conclusión es clara: la ULL ha progresado, pero lo ha hecho en menor medida que el conjunto de universidades.

Por contra, el índice de abandono del alumnado empeora al situarse en un 29,8%, cuando en el estudio anterior era del 28,4%. En este aspecto, la caída de la ULL la lleva hasta el último lugar de la clasificación.

El análisis de la calidad investigadora depara mejores noticias al centro tinerfeño. Sin llegar al nivel de universidades como la Autónoma de Barcelona o la de Valencia, que ganan, respectivamente, 22 y 16 posiciones en la tabla, la ULL escala cuatro puestos y mejora en casi todos los indicadores: la proporción de doctores respecto al total del profesorado es la quinta del país; en número de tesis, la institución asciende desde el puesto 42 al 34; la producción de artículos publicados en revistas de referencia se sitúa en el puesto 25 (en 2008 la Universidad no aportó datos); y los ingresos de I+D por personal investigador pasan de la posición 43 a la 31.

La ULL vuelve a tener uno de sus puntos fuertes en las investigaciones publicadas en revistas especializadas. Si bien el volumen de producción científica de la institución tinerfeña permanece en el mismo lugar que en el estudio precedente, el 26, su impacto -las citas recibidas- la hace subir del puesto 55 al 39.