El sindicato Intersindical Canaria (IC) ha avisado este miércoles de que los empleados "no se mantendrán pasivos ante una nueva agresión" en el Hospital Universitario de Canarias (HUC) si finalmente se confirma el recorte de camas o de plantilla.

Según un comunicado del sindicato, la gerencia del HUC y el Servicio Canario de Salud planean el cierre de, al menos, un servicio de hospitalización y reducir las actividades quirúrgicas, a la vez que amenazan con una próxima restricción de contrataciones de trabajadores temporales. "Estas medidas coincidirían precisamente con el verano, al ingenuamente entender la empresa que la conflictividad laboral que pueda provocar esta medida va a ser menor por las vacaciones de una parte del personal. Pero en esto también se equivocarían", afirma.

En este punto, explica IC que independientemente de los "ridículos" pretextos utilizados por la administración para la imposición de "estas ruines acciones", lo cierto es que los efectos que tendrían para el hospital serán "demoledores tanto en su apartado asistencial como laboral".

"Tendrían que explicarnos cómo es posible que, por ejemplo, mientras el servicio de Urgencias continúa saturado y con numerosos pacientes en los pasillos en espera de camas y que llevó recientemente a la dirección del HUC a improvisar unas dependencias anexas para ubicar de pacientes, ahora elimine toda un ala de la planta segunda para agravar aún más el problema", dice.

En esta línea, añade que "igual de descabellado es el intento poner mayores restricciones a la contratación de personal, precisamente en un centro sanitario como el HUC en el que la media de plantilla es manifiestamente inferior a la de cualquier otro hospital de la red pública canaria y con una oferta de empleo pendiente de concluir desde el año 2007".

ESCLAVISMO

"Con una plantilla laboral escasa y sobrecargada de actividad laboral, cualquier disminución de los recursos humanos llevaría a todos los grupos profesionales a una situación de puro esclavismo y generaría el caos en todos los servicios del HUC", sentencia.

A juicio de IC, de confirmarse estas medidas, los pacientes que no ingresen en el HUC por la reducción del número de camas o por la suspensión de las intervenciones quirúrgicas, automáticamente serían derivados a la sanidad privada. "Negro sobre blanco, la gerencia del HUC y la dirección del Servicio Canario de Salud, elimina irresponsablemente camas y crea intencionadamente problemas asistenciales en el centro de trabajo para regalarle derivaciones de pacientes y de dinero público a la sanidad privada. ¿No es este suficiente motivo para encausar penalmente a los responsables de la Consejería de Sanidad y del HUC por fraude, sabotaje al funcionamiento del HUC malversación de fondos públicos?", deja en el aire.

"Nos es igual qué partidos vayan a conformar el próximo Gobierno de Canarias, y nos es indiferente sobre quién vaya a recaer la gestión de la nueva Consejería de Sanidad. Pero lo que sí exigimos tanto a CC como al PP o al PSOE es que destierren cualquier posibilidad de esta nueva agresión laboral y asistencial a nuestro centro sanitario", defiende.

Añade IC que si como dicen, las cuentas no les cuadran, "les recomendamos recuperen el presupuesto tan alegremente puesto en manos de la sanidad privada, disuelvan la inoperante policía autónoma, cierren la telebasura y recorten los miles de cargos de confianza que pululan en la sanidad y en el resto de servicio públicos canarios".

"Y como segunda medida, busquen entre los propios sanitarios a personas de mayor entidad personal y profesional para gestionar la sanidad pública en general y el HUC en particular. Mientras tanto, contraten la plantilla de trabajadores que los servicios hoy urgentemente demandan y destierren la posibilidad de clausurar ni una sola cama de nuestro hospital", finaliza.