Entre las personas más críticas desde que se dio a conocer la aprobación de la fabricación de fármacos unidosis está el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Santa Cruz de Tenerife, Guillermo Schwartz, puesto que asegura que, "tal y como se ha planteado no es una medida que vaya a generar ningún ahorro".

"Si una caja con 40 pastillas de ibuprofeno cuesta casi dos euros y ocho monodosis también, ¿dónde está el ahorro?, se pregunta.

A juicio de Schwartz, "esto sucede porque los costes de empaquetado no pueden bajar de un determinado tope. El Gobierno central ha autorizado a los laboratorios a que fabriquen las monodosis de paracetamol e ibuprofeno, lo que se traduce en que sacarán cajitas individuales de algo que tiene un coste muy bajo. No vemos ahorro por ningún sitio porque una caja de ibuprofeno de 40 pastillas cuesta 1,90 euros, así que te sale menos de cinco céntimos cada una. ¿Dónde está el ahorro? ¿Se van a vender las cajas individuales a ese precio?", se cuestiona Schwartz.

"Supondría un ahorro siempre y cuando afectara a medicamentos de alto coste, donde la diferencia entre entregar tres o diez unidades fuera considerable, si no, no", asegura, antes de añadir que "lo más importante es que no se confunda a la población diciendo que se abaratan costes fraccionando las unidades, porque las cifras no salen de ninguna manera y, además, se ha empezado con dos fármacos que se consumen cuando hay dolor agudo, por lo que menos se entiende", argumenta.

Pese a todo, lo lógico es que después de que superen algunos retrasos causados por el transporte de los fármacos por vía marítima desde la Península, en cuestión de pocas semanas los canarios podrán adquirir una píldora de paracetamol de 650 mg por 12 céntimos, o una de 1 g por 17 céntimos, mientras que el ibuprofeno se podrá comprar a partir de 16 céntimos la dosis de 400 mg y de 17 céntimos la de 600, siempre que se cuente con una receta médica.