Los municipios turísticos del sur de Gran Canaria, San Bartolomé de Tirajana y Mogán, han registrado pequeños desprendimientos de piedras, vientos fuertes y un corto periodo de lluvia intensa durante el mediodía que no ha ocasionado incidentes destacables.

El alcalde de Mogán, Francisco González, y el concejal de Policía de San Bartolomé de Tirajana, Roberto Martel, indicaron que desde primera hora de la mañana se han convocado las correspondientes mesas de seguridad con el fin de coordinar cualquier protocolo de actuación.

La Mesa de Seguridad está compuesta por efectivos de la Policía Nacional y Local, Guardia Civil, Protección Civil, Bomberos y los departamentos de Vías y Obras, Asuntos Sociales y Parques y Jardines, entre otros.

En las zonas turísticas de ambos municipios, donde pernoctan unos 130.000 turistas aproximadamente, no se han registrado incidencias en los complejos alojativos, aunque el presidente de los extrahoteleros y la comisión de Turismo y Seguridad de la Feht, Tom Smulders, ha lamentado que el Ayuntamiento no convoque al colectivo a la Mesa de Seguridad.

En su opinión, el sector turístico debe estar coordinado con la Administración para afrontar cualquier eventualidad que afecte a los turistas.

Smulders ha lamentado que sólo haya recibido información de la alerta del Gobierno de Canarias y del Cabildo de Gran Canaria, que transmitió durante la noche a los touroperadores de la zona.

En el sureste de Gran Canaria, en el municipio de Ingenio, el viento y la lluvia remitió este mediodía después de haber descargado durante unos veinte minutos.

Los barrios donde más se notó la lluvia y el viento fue en La Pasadilla, y en la Leretase, donde se localizaron desprendimientos de poca consideración.

El temporal ha afectado, además, a las líneas de ADSL de la zona aunque, sin embargo, el servicio telefónico funciona con normalidad.