El consejero de Empleo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias, Jorge Rodríguez, ha instado hoy a los municipios a que asuman sus responsabilidades en cuanto a la gestión de las licencias para la venta ambulante.

Rodríguez, que se ha reunido hoy con los representantes de la Asociación de pequeños empresarios de mercadillos La Unión para informar sobre la nueva normativa europea que regula el sector, ha afirmado en un comunicado que sólo los ayuntamientos pueden decidir las condiciones de adjudicación de las licencias.

Con todo, Rodríguez se ha ofrecido para "mediar" con los ayuntamientos canarios para "minimizar" el impacto en el sector del comercio de mercadillos de la directiva para la liberalización de los servicios.

Los comerciantes expresaron su temor a que el cambio de normativa, que prohíbe la concesión de licencias por tiempo indefinido y establece el sistema de concurso público para la adjudicación de los puestos, pueda expulsar del sector a empresarios que han vivido toda su vida de los mercadillos municipales.

La situación se vería agravada además por el hecho de que cada vendedor necesita licencias en varios municipios y mercadillos para hacer rentable su actividad, dado que tener una sola, en una actividad que se realiza una vez por semana, no sería suficiente para mantener el negocio.

El Gobierno de Canarias se ha ofrecido a mediar entre los vendedores y los municipios para que todos estén perfectamente informados de la normativa, y para que los diferentes ayuntamientos aprueben una sola ordenanza que dé estabilidad y seguridad al sector.

El Gobierno de Canarias ha adoptado esta posición desde el inicio de las protestas de los vendedores ambulantes, aunque no siempre ha tenido la oportunidad de exponerla "ante la desinformación que se ha generado en torno a este conflicto", ha indicado Rodríguez.