La Asamblea Parlamentaria Paritaria ACP-UE reclamó ayer a la Unión Europea (UE) la adopción de una moratoria temporal de hasta dos años sobre la adopción de niños haitianos, tal y como se recoge en las propuestas incluidas en una resolución, que será sometida hoy a votación, en la que también se contempla la supresión de la deuda externa de Haití, estimada en 1.000 millones de dólares, la inversión en edificios resistentes a los terremotos y la necesidad de una "reforestación masiva".

La Asamblea ha debatido esta semana en Tenerife las labores de reconstrucción y la relación entre la pobreza y los desastres naturales, y ha mostrado su más sentido pésame y solidaridad hacia las víctimas del terremoto que tuvo lugar el 12 de enero de 2010 y que causó daños equivalentes al 15 por ciento del PIB, más de 200.000 muertos, 250.000 heridos y afectó de manera directa a más de tres millones de personas.

La resolución respalda el apoyo de la UE y otros donantes para la promoción de la producción alimenticia local, la rehabilitación de las infraestructuras dañadas y la puesta a disposición de los agricultores de los materiales necesarios para reactivar su actividad (semillas, fertilizantes y herramientas). La siembra de primavera, que transcurre durante el mes de marzo, supone un 60 por ciento de la producción alimenticia del país.

Miembros de la Asamblea reclaman a la UE la adopción de una moratoria temporal de hasta dos años sobre la adopción de niños haitianos. Además, pide a los países europeos que aúnen esfuerzos para cubrir las necesidades básicas de los niños, construir escuelas temporales y garantizar servicios psicológicos para los niños con carácter de urgencia.

El texto recalca que alrededor de 1,8 millones de personas sufrían de inseguridad alimentaria antes del terremoto, en un país donde el 60% de la población vive en zonas rurales y el 70% sobrevive con menos de dos dólares al día. La resolución insiste en que la comunidad internacional debe garantizar que sea la población de Haití, bajo la supervisión democrática de su Parlamento, quien protagonice la reconstrucción de su país.

Coordinación de la ONU

Además, es imprescindible que las Naciones Unidas sigan encargándose de coordinar todas las operaciones civiles y militares en el país caribeño. El texto también destaca la necesidad de llevar a cabo una "reforestación masiva" en Haití, dado que la situación actual del país hace que sea especialmente vulnerable a cualquier de catástrofe natural.

Los parlamentarios subrayan que el mandato de la Minustah debe ser revisado conjuntamente por la ONU y las autoridades de Haití para responder a las necesidades del país tras el desastre.

Además, piden a la Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Catherine Ashton, y a la comisaria de Cooperación Internacional, Ayuda Humanitaria y Respuesta a las Crisis, la búlgara Kristalina Georgieva, que adopten un "papel principal" en la respuesta de la UE a esta crisis.

Finalmente, el texto apoya el establecimiento, lo antes posible, de una unidad de protección civil de la UE. Con esta iniciativa se busca que la Unión tenga la capacidad de dar una respuesta humanitaria con carácter de emergencia en las 24 horas posteriores a un desastre.

Por otro lado, la Asamblea aprobará también una resolución en la que se pide a la UE y a los países ACP que inviertan más en energías limpias y nuevas tecnologías energéticas. El texto subraya, además, que el sector privado debe contribuir a la financiación de la lucha contra el cambio climático.

"Los países en desarrollo son los que corren mayor riesgo de sufrir el cambio climático, que tendrá un impacto financiero y económico en muchos sectores, entre ellos la agricultura y la industria ganadera", argumenta el texto.