El 70% de las recetas que dispensan en la actualidad las farmacias de la provincia tinerfeña son ya de la modalidad electrónica. Esa cifra se ha alcanzado en apenas seis meses, tras la puesta en marcha de este novedoso sistema en julio de 2009. Con ello son muchos los ciudadanos que se ven favorecidos por un método que está dirigido a agilizar los trámites para la obtención de medicamentos y a procurar un ahorro tanto de tiempo como de costes sanitarios.

En esencia, la receta electrónica permite acceder por medio de fibra óptica desde el propio despacho de farmacia a una base de datos del Servicio Canario de Salud en la que el médico ha incluido la prescripción del paciente durante el tiempo previsto para el tratamiento. En el caso de medicación prolongada se establece un máximo de tres meses antes de que el usuario deba regresar a la consulta para una nueva receta. El sistema informatizado facilita que cada paciente reciba sus medicamentos en las cantidades precisas.