Por unanimidad el Parlamento aprobó ayer la toma en consideración de la propuesta socialista para rebajar las barreras electorales desde el 30% actual hasta el 5% que anunciaron en abril.

Se trata del primer paso que deberá enfrentar la iniciativa antes de que pueda ser aprobada tras un proceso de negociaciones que promete ser tan largo como complicado.

Así lo dejaron ver los tres portavoces parlamentarios en esta materia, el del grupo proponente, Santiago Pérez, el del Partido Popular (PP), Manuel Fernández, y el de Coalición Canaria (CC), José Miguel Barragán, que mostraron de forma abierta posturas encontradas en relación al asunto.

Pero las diferencias que los tres partidos tienen tanto sobre el contenido de la iniciativa como acerca de la necesidad de abrir, de nuevo, este debate en la Comunidad Autónoma y su conveniencia se hicieron patentes ayer con toda claridad.

Pérez defendió la propuesta, como ya ha hecho en numerosas ocasiones, con el argumento de mejorar la "democratización" del sistema electoral de las Islas, argumento que molestó de entrada al portavoz nacionalista, quien replicó a Pérez preguntándole si acaso los partidos o los medios de comunicación en las Islas están amordazados.

Pero el PSC considera que el tope electoral actual, del 30% insular, constituye una restricción a la democracia y proponen su rebaja para que el Parlamento "refleje mejor" la voluntad expresada en los votos ciudadanos.

Sin argumentos en contra

Por este motivo, Pérez considera que la propuesta, que "mejora" la democracia en las Islas, "no admite argumentos en contra", y además, "no debería encontrar resistencia para su aprobación".

La confianza del portavoz socialista en la bondad y necesidad de su iniciativa contrastó con la de su homólogo del PP, que se preguntó nada más comenzar su intervención qué pintaba allí, "si nadie puede oponerse a esta propuesta de ley". Con ese argumento, añadió, "termina el debate y sólo cabe apoyar al PSC, pero las cosas no son así".

Los populares se mostraron más críticos que los nacionalistas frente a la iniciativa del PSC. Fieles a lo anunciado desde abril, reiteraron que esta reforma no es una prioridad para Canarias en este momento, tras hacer un repaso de los anteriores intentos para cambiar el sistema electoral de las Islas.

Pero el PP también ha dejado claro que no tomará una decisión de bloqueo inconsulta a la propuesta socialista porque no arriesgará el pacto de gobierno que tiene suscrito con CC.

Los nacionalistas, como se recordará, desean impulsar la reforma del Estatuto de Autonomía de Canarias (EAC) para ampliar las competencias de las Islas, asunto que, a su vez, no es prioritario para el PSC.

Pero como la reforma estatutaria no saldrá adelante en el Congreso sin el respaldo de los socialistas, CC, PP y el propio PSC saben que el destino de la modificación del sistema electoral y el estatutario van, de forma irremediable, de la mano.

Por este motivo, Barragán pidió al PSC que se muestre flexible para negociar su iniciativa ante los reiterados mensajes de Pérez de que la propuesta "no necesita ser justificada". Ambos debates tendrán lugar de forma simultánea.