NOS GUSTARÍA saber cuáles son los motivos que tienen algunos para que en Las Teresitas no se haga nunca nada.

Nos gustaría saber qué oscuros intereses mueven a los que pretenden que en la playa de Santa Cruz no se haga nada, que siga siendo un erial, que los ciudadanos no puedan disfrutar, junto a la playa, de instalaciones de ocio y recreo que relancen y revitalicen aquel lugar.

Cualquier ciudad del mundo, grande o pequeña, se estaría peleando por un proyecto como el de Perrault, uno de los diez mejores arquitectos del ranking profesional. Los que votaron "no" al llamado "mamotreto" (que probablemente se las tendrán que envainar tras la decisión de los tribunales, allá cada cual con su conciencia) saben perfectamente que aquel edificio, que puede parecer aparatoso, va en el proyecto a nivel de calle; es decir, se hace subterráneo prácticamente. Pero han podido más la demagogia y el desamor hacia Santa Cruz.

Valientes ediles que votan contra los intereses de su pueblo. Sin duda hallarán el castigo en las urnas, cuando toque, pero el mal que le hacen a la ciudad es inconmensurable, absurdo. Olvidan que la nuestra es la capital de Canarias. Y sería la única si los políticos del 27 no hubieran arbitrado la absurda división provincial que tanto desunió a los canarios. Santa Cruz de Tenerife, la capital de nuestra isla y de la comunidad autónoma, tiene que ser la próxima capital única de Canarias cuando estas islas se libren del yugo de quienes intentan someterlas durante siglos.

Parece que hay gente que quiere matar a Santa Cruz. Se pretende dar a la ciudad una playa urbanizada, con todas las comodidades. Que se cree en ella riqueza, imposible de conseguir sin permitir a la iniciativa privada que intervenga. Pero los de siempre, los del "no" a todo, se oponen radicalmente. ¿Por qué? ¿Cuáles son sus intereses, ya que siempre están hablando de los intereses de los demás? Que lo digan, que hablen claramente.

Las Teresitas fue y es un erial. Se contrata a uno de los mejores arquitectos para que cambie lo que no sirve por algo extraordinario para la ciudad. Iban a hablar de la playa en todo el mundo. Iba a intervenir en el desarrollo de Santa Cruz uno de los mejores urbanistas del planeta. Pero individuos que supeditan lo político a lo racional, su corta vista a la historia, le dan el carpetazo a lo que es bueno para la ciudad. ¿Por qué? ¿Qué alternativas manejan, además de su extraño e indigno "no"?

Se trata de matar a Santa Cruz. De herir a la ciudad en sus legítimas ansias de expansión y de futuro. Se trata de no dar respuesta a las necesidades de sus ciudadanos. Y a esto no hay derecho.