El presidente del Grupo Parlamentario Socialista, Manuel Marcos Pérez, dio ayer un "claro suspenso a los dos años de Paulinato sufridos en Canarias", al tiempo que aclaró que en lo que va de legislatura el presidente del Gobierno autonómico, Paulino Rivero, ha sido "incapaz" de implementar medidas que palien la actual situación económica.

Pérez explicó que las medidas anunciadas por el vicepresidente del Ejecutivo, José Manuel Soria, "no han amortiguado" la actual situación y Canarias ya cuenta con 280.000 parados. "Algunos expertos hablan de que al final del año en el Archipiélago habrá un 30% de desempleo, lo cual es gravísimo", puntualizó.

Rivero fue investido el 11 de julio de 2007 presidente del Gobierno de Canarias con 34 votos a favor de CC y PP. Los 26 diputados socialistas votaron en contra. "El Ejecutivo está desnortado y es bicéfalo", evaluó Pérez, que insistió en que no existe una "política clara" y que estos dos años han estado marcados por las continuas "desautorizaciones y descoordinaciones" dentro del Gobierno.

"CC y PP están unidos por sus intereses. Son como un sombrajo aguantado por dos palos que desde que se cae uno, también cae el otro", ironizó el diputado, que añadió que en este tiempo el Gobierno "ha emprendido una deriva peligrosa, que es la del deterioro de los servicios esenciales". "Se crean conflictos en Educación y Sanidad y conscientemente no se cumple la Ley de Dependencia", subrayó.

Entre otras medidas suspendidas por los socialistas, Pérez citó a la "hueca" estrategia de empleo. En este punto rechazó que el Gobierno no haya tomado en cuenta las propuestas planteadas desde su partido, que le reclama un refuerzo de los servicios sociales y un plan de choque contra la crisis.

Con respecto a los hechos positivos, el socialista se refirió a que "la pata, que es CC, dentro del Ejecutivo, ha rectificado el rumbo y ha dejado de enfrentarse al Gobierno central".