Las universidades canarias -La Laguna y Las Palmas de Gran Canaria- son las que invierten un menor porcentaje de su presupuesto en la prevención de riesgos laborales. Así se desprende de los datos contenidos en el primer informe nacional sobre el estado de estas políticas de seguridad en las instituciones españolas de educación superior, auspiciado por la Secretaría de Estado de Universidades del Ministerio de Ciencia e Innovación y realizado por la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE).

En concreto, los centros de las Islas destinan un 0,11% de sus cuentas a la prevención de riesgos en el trabajo, cuando la media nacional asciende al 0,27%. El informe de la CRUE se refiere a las comunidades autónomas y no recoge datos desagregados por universidades.

Según el estudio, las instituciones canarias pertenecen al grupo de las que invierten por debajo de la media nacional -junto a las de Murcia, Madrid, Galicia y Castilla y León-, mientras que Andalucía, Cataluña, Valencia, Cantabria, Castilla-La Mancha, Extremadura, Islas Baleares, La Rioja, Asturias (Oviedo), Zaragoza, País Vasco y Navarra lo hacen por encima.

Las públicas, por encima

La inversión en la Universidad de Murcia es, desde el punto de vista porcentual, ligeramente superior a la del Archipiélago, un 0,13%, mientras que las de Castilla y León destinan un 0,16% de su presupuesto a estas políticas. En la parte alta de la clasificación elaborada por la Conferencia de Rectores destacan la Universidad Pública de Navarra, con un 0,92% -3,4 veces superior a la media nacional-, y la Autónoma de Barcelona, con un 0,58%, prácticamente el doble de la media.

No obstante, el informe advierte de que las universidades realizan inversiones indirectas en materia de prevención de riesgos laborales que no han podido ser computadas. Asimismo, hace notar que los centros privados invierten menos que las públicas en una misma comunidad, con la salvedad de Madrid, donde el porcentaje que asignan a esta cuestión las privadas es mayor.

El informe, en el que han participado todas las universidades públicas y la mayoría de las privadas, refleja los puntos fuertes y las cuestiones mejorables del sistema universitario español en materia de prevención de riesgos y propone las medidas que se pueden tomar en el marco actual de transformación a través de la Estrategia Universidad 2015 y del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES).

Como la gran mayoría de las universidades públicas, las instituciones académicas isleñas cuentan con un modelo preventivo propio. Cuatro centros disponen de un modelo ajeno y sólo dos de uno mancomunado.

A tenor de los datos que se incluyen en el informe, la Universidad de La Laguna y la de Las Palmas de Gran Canaria cuentan con dos técnicos superiores en prevención de riesgos laborales cada una, ligeramente por debajo de la media nacional, que es de 2,5 técnicos por institución.

Comités de seguridad

Las universidades públicas españolas tienen contratados un total de 127 técnicos superiores, que asumen 262 especialidades, lo que representa 2,1 especialidades por técnico.

La ULL y la ULPGC cuentan con sus respectivos comités de seguridad y salud, ambos integrados por doce miembros: seis en representación de la universidad y otros seis de los trabajadores.