Calendario académico, adaptación al Espacio Europeo de Educación Superior, problemas de financiación... La actualidad de la Universidad de La Laguna (ULL) suele girar en torno a debates como éstos, en los que la institución académica tinerfeña decide su futuro como universidad pública de calidad. Sin embargo, el quehacer cotidiano de los estudiantes transcurre bajo otras coordenadas, la de las clases, las prácticas y los exámenes. Para descansar del estrés y la tensión que acarrean estas actividades -y también para completar su formación y cuidar su salud-, los alumnos disponen de una amplia oferta cultural y deportiva, aunque, en ocasiones, ellos mismos lo desconozcan.

Un total de 1.295 jóvenes participaron durante el primer trimestre de este curso en las actividades y cursos deportivos que ofrece la ULL. De ellos, una significativa mayoría, 1.073, eran mujeres.

La programación de deportes incluye más de cuarenta especialidades de lo más variopinto. Entre ellas figuran desde deportes autóctonos, como lucha canaria o juego del palo, hasta artes marciales, capoeira, bailes latinos y de salón, danza africana, senderismo o voleibol. La mayor demanda se registró en tai chi, con 260 participantes en sus diferentes modalidades, y senderismo, con casi 140.

Durante el curso pasado, 5.462 personas tomaron parte en actividades, campeonatos y torneos organizados por la ULL o a los que ésta concurrió, incluidos los Campeonatos de España Universitarios. Pese a parecer una cifra considerable, es la segunda más baja desde 1995.

Pese a la extensa oferta, sus principales usuarios, los estudiantes, no se muestran del todo satisfechos. Así, el portavoz del Sindicato de Estudiantes de la Universidad de La Laguna (Seull), Juan Marrero, considera que si bien en cultura se ha avanzado en los últimos dos años, la programación deportiva es "insuficiente". "Hemos exigido nuevos eventos y, sobre todo, mejores infraestructuras", explica Marrero, que pasa a detallar las carencias que la Universidad presenta en este aspecto: "El gimnasio es deficiente y tiene pocas máquinas, las pistas de atletismo están en mal estado y no hay una piscina". Seull opina que, una vez solucionadas las deficiencias en las instalaciones, será el momento de pedir nuevas actividades que, a su juicio, deben empezar por los deportes canarios.

Yasmina Hernández, portavoz de Asamblea del Movimiento Estudiantil Canario (AMEC) -el grupo de alumnos mayoritario en el claustro-, ofrece una visión similar e introduce una nueva objeción: "No se hacen estudios o encuestas para conocer la demanda de los usuarios y su disponibilidad horaria para elaborar la programación", dice. Además, apunta que la mejora de las infraestructuras y podría permitir que la ULL acoja competiciones oficiales, incluso de carácter nacional.

Algunos de los problemas han comenzado a solucionarse. La Universidad ha suscrito recientemente un convenio de colaboración con el Cabildo de Tenerife, que destinará 110.000 euros a la adquisición de material deportivo. Durante este curso se sustituirá el pavimento del pabellón central de parquet rígido por uno de aerolastic con cámara de aire, se construirá un almacén para el material de atletismo y se edificarán cuatro nuevos vestuarios.

Otra de las novedades será la puesta en marcha de una nueva modalidad de cursos denominados Naturaleza y Deporte, cuyo objetivo es que el alumno descubra el alcance saludable y social, solidario y ecológico que la práctica del deporte en un espacio natural puede significar.

Mantener y ampliar

En cuanto a las actividades culturales, la vicerrectora de Relaciones Universidad y Sociedad, Gracia Rodríguez Brito, indica que la intención de su departamento es mantener la oferta existente y ampliarla en lo posible. Para ello, la institución recurrirá a la colaboración con otras entidades.

En este sentido, destaca el convenio suscrito recientemente con el Ayuntamiento de La Laguna, que supone "un gran avance y un respaldo para coordinar y unificar la oferta cultural del municipio, algo especialmente importante en tiempos de crisis". Próximamente, un acuerdo con el TEA posibilitará que los premios culturales que otorga la ULL cuenten con una actividad asociada.

Las quejas de los alumnos también se refieren a la falta de difusión, tanto en el caso de las actividades deportivas como en el de las culturales. "Falta información. Hay gente que no sabe que existe un gimnasio o que tienen derecho a utilizar las instalaciones de Padre Anchieta", afirma Juan Marrero, mientras que Yasmina Hernández propone la realización de campañas informativas y asegura que, muchas veces, son los promotores de las actividades -alumnos o profesores- quienes se encargan de divulgarlas.

En este sentido, la vicerrectora recoge el guante y anuncia "una apuesta decidida por una mayor difusión. Es cierto que se hacen muchas cosas, pero se conocen poco".