Convencido de haber tenido una vida plena, hasta el punto de no arrepentirse de nada ("no he robado, ni matado, ni difamado y he estado cerca de la muerte por una enfermedad y no le tengo miedo"), Fernando Fernández mantiene una memoria casi matemática, y eso que siempre detestó esa ciencia. El presidente regional más efímero repasa aquí su trayectoria vital y política, insiste en que sabía que perdería la cuestión de confianza por la que pasó a la historia, desvela que nunca se ha dado de baja de la UGT, a la que contribuyó a relanzar en pleno franquismo, y que jamás se ha afiliado al PP. Además, se muestra muy crítico con la situación de Canarias y recalca que, "aunque no deba decirlo, sí pienso que Rivero está siendo el peor presidente de las Islas".