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Ver galería >Pasajeros del turoperador británico Thomas Cook este martes en el Tenerife Sur, asistidos por personal del Gobierno británico y personal de su embajada en España, para facturar en los vuelos fletados desde la isla para repatriarlos a Gran Bretaña. La suspensión de pagos anunciada del turoperador británico Thomas Cook, uno de los mayores a nivel global, ha dejado en tierra a 600.000 viajeros en todo el mundo y supone un duro golpe para dos de sus principales destinos en España: Baleares y Canarias.
María Pisaca
Pasajeros del turoperador británico Thomas Cook este martes en el Tenerife Sur, asistidos por personal del Gobierno británico y personal de su embajada en España, para facturar en los vuelos fletados desde la isla para repatriarlos a Gran Bretaña. La suspensión de pagos anunciada del turoperador británico Thomas Cook, uno de los mayores a nivel global, ha dejado en tierra a 600.000 viajeros en todo el mundo y supone un duro golpe para dos de sus principales destinos en España: Baleares y Canarias.
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Pasajeros del turoperador británico Thomas Cook este martes en el Tenerife Sur, asistidos por personal del Gobierno británico y personal de su embajada en España, para facturar en los vuelos fletados desde la isla para repatriarlos a Gran Bretaña. La suspensión de pagos anunciada del turoperador británico Thomas Cook, uno de los mayores a nivel global, ha dejado en tierra a 600.000 viajeros en todo el mundo y supone un duro golpe para dos de sus principales destinos en España: Baleares y Canarias.
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Pasajeros del turoperador británico Thomas Cook este martes en el Tenerife Sur, asistidos por personal del Gobierno británico y personal de su embajada en España, para facturar en los vuelos fletados desde la isla para repatriarlos a Gran Bretaña. La suspensión de pagos anunciada del turoperador británico Thomas Cook, uno de los mayores a nivel global, ha dejado en tierra a 600.000 viajeros en todo el mundo y supone un duro golpe para dos de sus principales destinos en España: Baleares y Canarias.
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