La compañía eléctrica Endesa ha creado un fondo de 25 millones de euros para luchar contra la pandemia del Covid-19 a través de un plan que contempla ayudas directas para la compra de material hospitalario y donaciones. La empresa anunció ayer que ha comprado respiradores para las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) y dos millones de mascarillas por valor de 10 millones, que pondrá a disposición de las autoridades sanitarias.

Endesa también pone a disposición del Gobierno y Comunidades Autónomas sus infraestructuras, material y equipos para ayudar en las zonas con más necesidades. Esta iniciativa se suma a las ya realizadas, tales como evitar los cortes de suministro a los clientes del sector residencial por impagos o flexibilizando las condiciones a pymes, autónomos y familias con necesidades.

Pablo Casado, director general de la empresa en Canarias, explicó que Endesa "se pone al servicio de las instituciones con este fondo especial, para ayudar donde más se necesita, y continuamos desarrollando todas las acciones y recursos que hemos puesto a disposición de nuestros clientes y de la sociedad desde el inicio de esta grave crisis". "La situación actual -añadió Casado- hace que las empresas debamos actuar de forma diferente en nuestros negocios tradicionales y en sectores diferentes a nuestra actividad pero que ahora necesitan, más que nunca, todo nuestro apoyo. Por eso Endesa ha diseñado este plan, con todas las acciones en las que somos más útiles para la sociedad y para nuestros millones de clientes".

La empresa adelantó ayer en un comunicado que "dada la emergencia sanitaria sin precedentes en España derivada por la pandemia mundial generada por el Covid-19, Endesa, dentro de su compromiso con la sociedad, ha diseñado un Plan de Responsabilidad Pública, dotado con 25 millones de euros, para ayudas directas a la compra de material, condiciones especiales de suministro y donaciones para paliar las principales necesidades sanitarias y sociales provocadas por la crisis sanitaria".

Ayuda inmediata y urgente

En una primera fase, el Plan de Acción está dirigido a la ayuda inmediata y más urgente, en torno en torno a 3 ejes, El primero es el referido a la donación de materiales y servicios, por el que Endesa pondrá a disposición su capacidad logística y de compra tanto nacional como internacional, así como personal cualificado y los medios necesarios para la provisión de equipos de protección para el personal sanitario o de servicio público (batas, mascarillas y resto de equipos de protección Individual -EPI-), e instrumental para asistencia de los pacientes hospitalizados (respiradores, test, fármacos).

El segundo eje es el denominado Condiciones especiales de suministro energético a Residencias, Hospitales y Hoteles Medicalizados, y consiste en poner a disposición del servicio público su capacidad de proveedor energético para las instalaciones sanitarias. Así, aportará equipos y personal para garantizar el suministro eléctrico en hospitales de campaña y hoteles medicalizados (generadores electrógenos, aumento de potencia, resolución de averías), además de suministro gratuito durante el estado de alarma a los hoteles medicalizados que sean clientes de la compañía.

El tercer eje es el de las donaciones económicas a instituciones, organismos y centros sanitarios que ayuden a cubrir necesidades básicas de especial gravedad previamente identificadas. Aparte de la adquisición de respiradores para UCI y los dos millones de mascarillas, que se pondrán a disposición de las autoridades sanitarias competentes. La compañía proporcionará apoyo a los equipos de servicio público (policía local, UME, Protección Civil) a través de materiales, vehículos y servicios que se puedan requerir para abordar esta emergencia epidemiológica.

Una iniciativa más

La iniciativa se suma a las que ya ha venido haciendo la compañía estos días evitando los cortes de los clientes del sector residencial por impagos, flexibilizando las condiciones a pymes, autónomos y familias con necesidades, ofreciendo alternativas telemáticas para que nadie tenga que salir de casa para interactuar con Endesa, analizando caso a caso las peticiones de las empresas clientes, asegurando los pagos inmediatos a los proveedores de los canales de atención y ventas, y a las donaciones desde sus centrales a hospitales de las zonas donde tiene infraestructuras.

Endesa también ha reforzado la operativa de sus centros de control de distribución y de control de la energía y centrales de generación para asegurar el suministro eléctrico en los territorios en los que opera (Canarias, Aragón, Andalucía y parte de Extremadura, Baleares, Cataluña, Galicia y Castilla y León). También ha duplicado su centro de control de generación renovable, en Madrid, con un centro espejo en Santiago de Compostela. Una vez superado el problema sanitario, que ahora es el más acuciante, Endesa se plantea en una siguiente fase otras medidas dirigidas a paliar los efectos que la crisis económica tendrá sobre los clientes más vulnerables.

Vulnerables

La empresa, a través de su Fundación, ya está volcada en ayudar a los colectivos más vulnerables con los que colabora y paliar los efectos de la crisis en los más necesitados. Así, en colaboración con organizaciones ya socias de la Fundación, Endesa ayudará a Cáritas con 100.000 euros, a la Fundación SAFA en Andalucía con 270.000 euros para familias, a la Fundación Integra con 45.000 euros y, dentro del programa Retotech, se utilizarán las impresoras donadas a los centros educativos para hacer viseras protectoras para los sanitarios y cuerpos de ayuda.

El director de la compañía en el Archipiélago resaltó que Endesa siempre ha estado implicada en el crecimiento y bienestar de las zonas en las que trabaja. "Somos muy conscientes de la capacidad de los ciudadanos, en general, y de los trabajadores de Endesa, en particular, de dar lo mejor de cada uno. Volvemos a aunar esos esfuerzos individuales alrededor de un objetivo común para canalizarlos bien y asegurar que llegan a donde más se necesita", subrayó.

"Sin la actitud y capacidad de nuestros empleados -sostuvo Casado- no podríamos no sólo atender esta crisis con el nivel de calidad que lo estamos haciendo, sino que no podríamos ofrecer, como es el caso, una ayuda extra a las comunidades y a las autoridades sanitarias. Es un orgullo contar con estas 9.700 personas dispuestas, siempre, a arrimar el hombro". A su juicio, esta crisis pone a prueba el nivel de digitalización de las empresas, por lo que "la capacidad de Endesa de seguir produciendo, distribuyendo y llevando a los hogares toda la energía necesaria es ejemplo de que ese esfuerzo previo en digitalizar nuestros procesos era más que necesario, era vital".

"Con la ayuda de internet, del teléfono, de las redes sociales o de cualquier canal a nuestra disposición, estamos escuchando a los clientes para que estén informados y ayudarles en lo que necesiten; cada caso, cada situación, se está analizando; los clientes domésticos, los negocios, pequeños y grandes, otras compañías, nuestros colaboradores, todos nos tienen al otro lado, a su disposición", concluyó.