eldia.es

eldia.es

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Hoy acaba la operación salida

Con la desvinculación a préstamo de Jorge Padilla, que se irá en las próximas horas, el Tenerife logra reubicar

a todos los jugadores que declaró prescindibles l> Los casos de Míchel y Rubén Díez, los más espinosos

Jorge Padilla conversa con Sam Shashoua durante un entrenamiento en el Heliodoro. | | CD TENERIFE

El trabajo de arquitectura del proyecto deportivo del Tenerife no ha requerido de fina cirugía solo en el capítulo de incorporaciones. Casi tan arduo como el proceso de persuadir a los futbolistas pretendidos ha sido el de negociar las condiciones para la salida de aquellos que les sobraban a Juan Carlos Cordero y Luis Miguel Ramis. Hoy, a falta de tan solo cuatro días para que expire el plazo para dar altas y bajas en las ligas profesionales, ambos pueden darse por muy satisfechos con el cumplimiento de los objetivos planteados en verano. De hecho, casi el 100% de los hombres declarados prescindibles ya están fuera de nómina, la mayoría de ellos con nuevo destino confirmado.

El último asunto pendiente en el episodio de las desvinculaciones es el del majorero Jorge Padilla, que hoy mismo podría salir a un equipo de Segunda RFEF. Aunque su cesión al Real Valladolid estuvo a punto de caramelo, la operación para su reubicación se ha demorado mucho más de lo que le gustaría a Cordero y al propio ariete de Fuerteventura, que trabaja al margen del grupo a la espera de que su futuro se clarifique en cuestión de unas horas. Anoche, tanto sus agentes como la dirección deportiva blanquiazul trabajaban contrarreloj para cerrar su partida.

Complejidad

Los casos más espinosos ya están resueltos de forma exitosa. Casi como sacarse una muela fue lograr la anticipada rescisión del contrato de Míchel Herrero, que se ha ido sin rencor y con un mensaje de despedida conciliador, si bien las negociaciones fueron tortuosas y los días previos al adiós, muy turbulentos. De hecho, el día antes de firmar protagonizó un desagradable incidente con un canterano, con el que incluso llegó a las manos en el transcurso de un entrenamiento. No contaba para Ramis, pero aún así, y a sabiendas de su complicada posición, optó por demorar su salida para quedarse con la mayor porción posible de los emolumentos que el club había estipulado para el segundo de sus años de contrato, que finalmente no cumplirá.

In extremis, el Tenerife se salió con la suya en el caso Míchel y también en el de Rubén Díez, por quien se pedía a su club de destino (Deportivo de La Coruña) no solo que abonase la totalidad de su ficha; también el pago adicional de unos 50.000 euros para así compensar el desembolso que hizo el representativo para sacarlo de Castellón, hace ahora 12 meses. El extremo nunca brilló de blanquiazul y su protagonismo se fue apagando hasta límites preocupantes, de ahí que a principios de verano se le indicara a su representante, Eduardo Llanos, que debían buscarle una salida. La operación resultó compleja por las pretensiones blanquiazules, que finalmente fueron satisfechas con un sacrificio personal por parte del propio Rubén, que se va al club de Riazor tan solo por un año.

Junto a la de Jorge, la del castellonense será la única cesión que firmará Cordero durante este verano. Lo demás han sido despedidas definitivas, en algún caso amargas como la de Elliot Gómez, quien quiso reivindicarse en su regreso a casa y no logró convencer a Ramis. No en vano, fue uno de los primeros descartes del verano y ni tan siquiera llegó a incrustar su nombre en la concentración realizada por los blanquiazules en Pinatar. Jugará en el Compostela, en Segunda RFEF, después de obtener la carta de libertad hace un par de semanas.

Antes, Cordero hizo hueco en nómina con tres salidas que estaban cantadas: las de Joselu Moreno, Emmanuel Apeh y Alberto Jiménez, éste último aún sin nuevo equipo tras brillar con luz propia en las filas del Albacete, con el que logró ascender. Contabilizando estas desvinculaciones, en total son 13 las que se han producido si también se tienen en cuenta las de aquellos jugadores que finalizaron su contrato en junio. En la mayoría de las situaciones, la dirección deportiva no intentó renovarles. Se buscaba una reforma muy ambiciosa en el primer equipo del Tenerife, que parece casi conseguida con siete fichajes cerrados y salidas en todas las líneas.

En la portería dijo adiós Dani Hernández, como era previsible, después de un curso casi en blanco, y así se abrió la puerta a la venida de Javi Díaz; en defensa se marcharon los dos laterales zurdos, Pomares al Oviedo y Álex Muñoz al Levante, rival del Tenerife el pasado sábado; y en las bandas tan solo hubo algún escarceo para tantear la voluntad de permanecer en la Isla de Álex Bermejo, quien prefirió buscar un cambio de aires y se enfundó la elástica del Burgos. A Mollejo y Nahuel también se les dejó ir, para así acometer una remodelación casi completa de los dos costados en el ataque del representativo.

El caso Moore

Otro propósito conquistado durante el tiempo estival por la dirección deportiva fue la venta de Shaq Moore, imprescindible para reequilibrar el margen salarial y poder acometer algunos de los fichajes realizados hasta la fecha, así como pujar por los que todavía están por venir. El traspaso al Nashville se hizo por debajo de los dos millones de euros, pero permitió al Tenerife tener un techo de gasto muy semejante al del curso pasado, entonces con la inyección que significó el acuerdo conjunto de los clubes de LaLiga con el fondo CVC.

Esprint final por tres fichajes más

El Tenerife espera cerrar hasta tres incorporaciones en las próximas 96 horas, antes de que el jueves cierre definitivamente el mercado estival. Los esfuerzos de la dirección deportiva se centran en un lateral izquierdo proveniente del extranjero, un delantero (podría ser Iván Romero si le deja venir el Sevilla) y un jugador para la banda derecha. Para esta última demarcación gusta mucho Curro Sánchez, pero el sábado tuvo minutos nuevamente con el Almería y su salida se antoja harto complicada. Si el club tuviese margen salarial para más, no se descarta apuntalar también otras demarcaciones. Para el Tenerife, será el final de mercado más vertiginoso en mucho tiempo.

Compartir el artículo

stats