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Liga Endesa

Cruel final para un Lenovo batallador

El club lagunero remonta 12 puntos tras un tramo de partido muy flojo (59-47), pero no logra rematar en la prórroga | Salin fuerza el tiempo extra, aunque falla el libre para el triunfo | Sentencia Dani Pérez sobre la bocina

Fran Guerra (d) lucha por el rebote junto a Yankuba Sima. ACB Photo

Pese a remontar una desventaja de 12 puntos (59-47, 28') y tener un tiro libre para ganar (Salin solo anotó dos de una serie de tres para forzar el tiempo extra), el Lenovo Tenerife no fue capaz de sentenciar al BAXI Manresa y acabó cayendo por un doloroso 95-93. Una canasta sobre la bocina de Dani Pérez en un cierto desajuste defensivo final sentenció a los de Txus Vidorreta, que precisamente habían encontrado en esa aplicación atrás la fórmula más resolutiva para mantener sus opciones de victoria.

Con Shermadini totalmente desaparecido (dos puntos y dos rebotes) y Huertas más errático de lo normal pese a su mejora final (13 puntos y ocho asistencias), fueron Bruno Fitipaldo (17 tantos y siete asistencias para 27 de valoración) y Fran Guerra (20 puntos, seis rebotes y 20 créditos), los que mantuvieron con vida a los aurinegros. No dio para que el cuadro canarista contrarrestara las grandes actuaciones de Moneke primero y Thomasson ya en la prórroga. Entre ambos sumaron 41 puntos, pero fue Dani Pérez el que ejecutó a los isleños.

Le costó comenzar a carburar al Lenovo, que de entrada se topó con dos errores en el tiro, un triple de Jou, pero sobre todo con la actividad superlativa de Moneke, que no solo le sacó los colores a Wiltjer, sino también a cualquier otro par con el que quedó emparejado en los cambios, aprovechando una deficiente transición aurinegra, e incluso en el rebote ofensivo. Así, el nigeriano se disparó a los nueve puntos en cuatro minutos (12-8).

El cuadro lagunero encontró aire con el tiro exterior (triples de Salin y Doornekamp) y con la entrada de Guerra. El grancanario explotó primero su capacidad para ser vertical en el 2x2 y reboteando y asistiendo. De esta forma, con triple de Sulejmanovic, el cuadro lagunero tomó la delantera por primera vez (13-15).

Una recuperación basada en una buena circulación de balón (siete asistencias en 10 minutos), pero que no tuvo gran continuidad por los errores de Huertas (pérdida y triple que no tocó ni el aro), por la presencia de Bako por encima del aro, y por ciertos momentos de locura a causa del juego eléctrico de los locales. Solo la impronta de Fitipaldo, con una asistencia a Shermadini y dos libres finales tras robar un balón permitieron a los canaristas acabar el primer cuarto en franquicia (17-19) pese a su inusual y discreto 4/11 en tiros de dos.

Un buen movimiento de balón de Rodríguez, otro robo de Fitipaldo, una canasta de Salin tras saque de fondo, e incluso dos puntos de Wiltjer tras rebote ofensivo mantuvieron por delante a los de Vidorreta (23-27, 16') pese a dejarse por el camino algunos balones que buscaron el interior de la zona. Pero ahí el duelo se volvió loco. Mucho. Con un par de velocidades por encima respecto a los minutos previos. Demasiado para que el Lenovo mantuviera su orden por mucho que en el arranque a los aurinegros no les hubiera importado lo más mínimo recoger el guante lanzado por su rival.

Así, a las cuatro pérdidas cometidas hasta el ecuador del acto, el Canarias agregó a su debe algunos regalos más (siete en total), varios a la hora de sacar el balón ante los constantes 2x1 sobre su base. Encajaron de esta forma los de Vidorreta un 8-0 (31-27) que solo pudieron contener desde el tiro libre (31-29). Insuficiente ante un nuevo arreón de raza por parte de Moneke (cinco puntos y tres rebotes en el cuarto) y, sobre todo, por su nulo acierto desde el 6,75, con un 0/6 en el segundo periodo (35-29).

A la vuelta de vestuarios el partido se metió en un intercambio de canastas, y aunque Guerra y especialmente Sulejmanovic se pusieron las botas cerca del aro (47-42), al Lenovo no le sirvió para nada esta productividad ya que los locales mostraron una versión muy por encima de lo que acostumbran desde el 6,75. Así, dos triples de Dani Pérez, otro de Moneke y un cuarto de Thomasson le dieron un nuevo impulso a los catalanes hasta el 55-44.

Con Huertas horrible en la parcela ofensiva pese a un triple sobre la bocina (55-47), el Manresa incomodó por completo la salida canarista de balón, al margen de correr cada vez que pudo para hacer 24 puntos en menos de ocho minutos y alcanzar una nueva renta máxima (59-47). Todo antes de un nuevo intercambio entre Guerra (59-52) y Dani García (64-54, 30').

Una pequeña aparición de Sastre en ataque acompañado de un intenso trabajo defensivo sobre Dani Pérez, así como la batuta anotadora de Fitipaldo (cinco puntos y asistencia a Guerra), el Lenovo Tenerife supo sobrevivir e ir arañando poco a poco su desventaja ya en el último cuarto (67-63, 32'). Muy sólido atrás (con papel notable de Borg), la vuelta a pista de Wiltjer (posteo y mate en rebote ofensivo) el Canarias terminó de salir del atolladero (68-68).

Reacción desde la parcela defensiva que el Lenovo no terminó de culminar al fallar Guerra un triple y cometer Shermadini falta en ataque. Aun así, a la tercera por fin Huertas acertó para el 68-70.

Ahí, el Canarias se topó con su mayor debe de todo el partido, el triple. Erró Fitipaldo, pero no así Jou ni Dani Pérez para el 76-72. Recortó Guerra para el 76-72, pero en los cambios defensivos el cuadro de Vidorreta pagó caro el déficit de centímetros, lo que permitió rebotear a Bako (78-74). De nuevo anotó Huertas (78-76) antes de que los locales volvieran a sacar petróleo de una segunda opción (79-76). Con 29 segundos por jugarse, Wiltjer ejecutó la pizarra a la perfección para anotar un triple frontal (79-79).

A 21 segundos del final, jugó a defender el Canarias, que logró llevar a su rival al límite hasta que una penetración de Thomasson no encontró oposición para el 81-79. Solo un segundo por jugarse, pero de nuevo los aurinegros lograron poner el balón para tratar de ganar: Salin sacó falta en su tiro de tres. Anotó los dos primeros, pero erró el tercero para llevar el duelo al tiempo extra (81-81).

Pese a que fue Wiltjer el que estrenó la prórroga, el Lenovo Tenerife fue incapaz de mantener la delantera ante la impronta de un Thomasson imparable, primero contra Fitipaldo y luego ante Salin (91-89). Los canaristas aguantaron gracias a Huertas y Guerra, si bien una pérdida del brasileño evitó que los aurinegros volvieran a situarse por delante. Moneke no lo desaprovechó a 26 segundos del final (93-91) antes de que Huertas respondiera con dos libres (93-93) con solo 7”6 por jugarse. En la acción definitiva, el Canarias no terminó de estar acertado en su defensa y dejó solo a Dani Pérez para que el base anotara la canasta del triunfo local.

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