De nuevo, con la miel en los labios. La UDG Tenerife Egatesa iba camino de sumar su primer triunfo del curso ayer ante un Real Betis inferior, pero finalmente las guerreras igualaron a dos goles en el feudo verdiblanco, con tantos de Koko y Pisco (2-2) en una tarde en el que el marcador llegó a reflejar un claro 0-2 a falta de media hora para el final.
El encuentro comenzó con dominio alterno, con dos equipos estudiándose mutuamente, sin llegar a pisar área de forma clara hasta el minuto 11, cuando las guerreras abrían el marcador. Un encuentro igualado, cuya balanza se rompería en la primera ocasión clara visitante merced a una rápida y pilla Ange Koko, anticipándose en un mal entendimiento entre zaguera y portera rival, y aprovechando un buen servicio en profundidad de Natalia. Motivado y enchufado, dio un paso adelante el representativo tras el gol, volcando sus ataques por banda derecha con una inspirada Koko y también a balón parado, pero Thalmann desbarataba cualquier acción.
Una vez reanudado el choque, la UDG Tenerife se empleó a fondo para cerrar la victoria. En una internada de Martín-Prieto, ésta era objeto de falta en el área y Pisco hizo el 2-0 desde los once metros a los 54 minutos. Sosa acortaba distancias para las locales con un derechazo. En el tramo final las porteras captaron especial protagonismo, sobre todo Aline Reis. Segura y atenta, evitó que toda acometida igualara el marcador, hasta que la árbitra señaló penalti para que Sosa anotara el empate a dos. Los esfuerzos de las guerreras por anotar el tercero en las postrimerías no derivaron en el resultado deseado.
Otro empate que sabe a poco por lo visto sobre el terreno de juego, una identidad y valores que permanecen intactos durante un tramo agridulce y exigente de competición. Ambición e ilusión no faltarán en el próximo reto en La Palmera, ante el Levante UD (domingo, 19 horas).
Díaz: «Las lesiones nos condicionaron»
Tras el partido, el técnico del Granadilla, Francis Díaz, reconocía que su equipo estaba «un poco triste». «Hemos sido superiores durante el partido y luego sucede una situación clave por los cambios que debemos hacer ante las lesiones de Doblado y Koko, que nos estaban dando mucho. Esas lesiones nos condicionaron porque no pudimos hacer modificaciones tácticas», argumentó el preparador tinerfeño, que ya piensa en el partido del domingo contra el Levante. «Debemos resarcirnos cuanto antes de este mal sabor de boca», dijo.
