Una central eléctrica de Londres premiada en Singapur

Informando desde el Festival Mundial de la Arquitectura, conocido como WAF que este año 2023 concluye su edición hoy sábado, vamos a destacar a uno de los premiados. En la categoría de Mix-Use el galardón es para la famosísima central eléctrica de Battersea que aparece en los discos de Pink Floid y, gracias a esa relación con la música, se convirtió en la chimenea más famosa de la capital londinense. Haciendo historia, se construyó en dos fases antes y después de la Segunda Guerra Mundial según los diseños de Sir Giles Gilbert Scott con interiores de J Theo Halliday. Desmantelado en 1983, se convirtió en el edificio abandonado más famoso de Londres, vulnerable a pesar de su estatus de Grado II de protección patrimonial y su perfil icónico familiar en la cultura popular.

Sujeto a una serie de planes de desarrollo estancados, sufrió un gran abandono y deterioro y demolición parcial. La central eléctrica se añadió al registro de Patrimonio en Riesgo en 1991 y permaneció allí durante 30 años hasta su eliminación en noviembre de 2021.

Reurbanización

Los arquitectos del equipo WilkinsonEyre consiguieron finalmente llevar a cabo la reurbanización gracias a la compra por parte de un consorcio de empresas malasias que adquirieron una zona en torno a la estación de 42 acres en 2012 y el establecimiento de Battersea Power Station Development Company, con sede en el Reino Unido.

Se ha convertido ahora en el monumento industrial que es el centro de un nuevo barrio, Battersea Power Station Phase II y es, en sí mismo y en su diseño, un verdadero esquema de uso mixto de considerable complejidad.

El enorme edificio de ladrillo rojo alberga nuevos usos de oficinas, comercio minorista, residencial, eventos y ocio. El entorno se ha reinventado como un nuevo parque y espacio público. El plan, llevado a cabo por plazos, ha contribuido a la creación de una nueva estación subterránea de soporte a todo el complejo, al mismo tiempo un centro de energía en el lugar proporciona calefacción, refrigeración y electricidad con bajas emisiones de carbono.

Las partes inferiores del edificio, incluidas las antiguas Salas de Turbinas (A y B) que datan de las décadas de 1930 y 1950, ahora están abiertas como galerías de venta minorista, alimentos y bebidas, al tiempo que conservan lo mejor de sus características patrimoniales, flanqueadas por Switch Houses East y West, cada una con aproximadamente 100 unidades residenciales, mientras que la parte superior de la Boiler House se convertirá pronto en las nuevas oficinas británicas de Apple con un espacio para eventos debajo. Los techos tienen jardines completamente plantados.

Intervención estructural

Destaca la meticulosa restauración de elementos patrimoniales clave, como la Sala de Control A, y también las nuevas intervenciones estructurales, muy audaces, como las vigas de cuerdas de arco que sostienen las paredes de la entrada sur.

El equipo de diseño de WilkinsonEyre se ha asegurado de que lo nuevo y lo antiguo compartan una estética consistente. La restauración y las nuevas intervenciones se han logrado llevar a cabo sin perder la sensación de escala, dramatismo e historia que caracteriza a Battersea Power Station.

Dulce Xerach Pérez. Abogada y doctora en arquitectura. Investigadora de la universidad europea